Al momento de repasar las hazañas de Ayrton Senna en la Fórmula 1 es inevitable mencionar aquel Gran Premio de Mónaco de 1984 en el que el brasileño asombró por su talento bajo un aguacero. Senna estaba para ganar, pero la bandera roja que apareció poco después de superar a Alain Prost (McLaren) dejó el triunfo en manos del francés y a él con un gran segundo puesto.
Senna disputó aquella competencia con humilde Toleman TG184-Hart propiedad del equipo inglés fundado por los hermanos Ted y Bob Toleman. El paulista había comenzado su primera temporada en la Máxima ese mismo año con el TG183B.
Aunque abandonó en su debut en la categoría nada menos que en el GP de Brasil, se repuso con dos sextos puestos en los GP’s de Sudáfrica y Bélgica. Sin embargo, en el GP de San Marino el equipo tocó fondo: Senna no se pudo clasificar y quedó al margen de la competencia. Por eso la llegada del nuevo modelo TG184 para el GP de Francia se tomó como una bisagra. No obstante, una rotura del motor Hart en plena carrera volvió a dejar a Ayrton con la cara larga.
Pero la revancha llegó rápido y en el circuito más emblemático de la F.1: el callejero de Montecarlo. En su sexta presentación en la especialidad y pese a una lluvia torrencial, Senna se lució y estuvo cerca de ganar. “Creo que estamos en presencia de un talento sobresaliente en el automovilismo”, afirmó el inglés James Hunt, campeón en 1976, quien oficiaba de comentarista de la TV. Poco después de la prueba, los mecánicos de Toleman confirmaron que Senna estuvo cerca de abandonar debido a daños que había sufrido la suspensión…
El tiempo se encargó de darle la razón a Hunt ya que Ayrton Senna se convirtió en uno de los grandes pilotos de la Fórmula 1 con sus títulos de 1988, 1990 y 1991, mientras que el fatal accidente que sufrió el 1 de mayo de 1994 en el GP de San Marino lo elevó al estatus de mito. Por eso todo lo que está relacionado con el brasileño es objeto de devoción, como ése Toleman TG184 que fue subastado por Bonhams.
“La pelea Senna-Prost de finales de los ‘80 y principios de los ‘90 fue una de las mayores rivalidades deportivas de todos los tiempos, con dos grandes campeones que proporcionaron a los fanáticos de F.1 algunas de las carreras más espectaculares jamás vistas. Estamos encantados de presentar en esta subasta el Toleman-Hart TG184 de 1984 que desencadenó esta gran rivalidad”, explicó Mark Osborne, jefe global de deporte motor en Bonhams.
Aunque la casa de subasta no arriesgó a decir cuánto se pagaría por este vehículo diseñado por Rory Byrne y Pat Symonds, existía la referencia de 2015 cuando este mismo F.1 se vendió en más de un millón de euros. Como era de esperarse, la cifra fue más elevada: 1.6 millones de euros.