La empresa británica TDF, que está compuesta por varios ingenieros con pasado en la Fórmula 1, presentó el novedoso TDF-1, un monoplaza similar a un F.1 de la actualidad que está equipado con varios elementos más duraderos y menos costosos que los utilizados en la Máxima.
El TDF-1 está concebido sobre la base de dos modelos que corrieron en la categoría hace algunos años: el Marussia MVR02 de 2011 y el Sauber C31 de 2012.
Los bólidos de TDF están equipados con un motor desarrollado por la propia compañía denominado TDFM600T de 1.7 litros con turbo que ofrece 608 CV a 9.000 rpm. Este impulsor tiene un par motor mucho mayor y en un rango de vueltas más amplio para extender su durabilidad.
El impulsor, que tiene un mapeo ajustable a los requerimientos del conductor, está acoplado a una caja de cambios semiautomática de seis relaciones fabricada en magnesio y fibra de carbono, mientras que el embrague multidisco es de AP Racing.
El TDF-1 mantiene las suspensiones originales de los modelos empleados para su desarrollo, aunque con amortiguadores Öhlins ajustables. Además, utiliza frenos a disco Hitco de carbono con pinzas Brembo de cuatro pistones y pastillas AP Racing, también de carbono. Mientras que los neumáticos, calzados en llantas de 13 pulgadas de O.Z. Racing, son Pirelli P Zero.
El auto mantiene la aerodinámica de un F.1 y hasta incluye el sistema DRS (Drag Reduction System), que puede funcionar de manera manual o automática. Obviamente, el volante es menos complejo y a la medida de las prestaciones del TDF-1 con una pantalla OLED, controles y paddle shift.
Con un peso de 600 kilos, este monoposto británico ofrece el 95% de las prestaciones de su equivalente de Fórmula 1. De hecho, es capaz de generar hasta 4 G de fuerza lateral en curvas de gran velocidad y hasta 4,5 G en frenadas. Acelera de 0 a 100 km/h en menos de dos segundos y alcanza una velocidad de punta de 322 km/h.
Por sus características, el auto solo necesita un mecánico para su puesta en pista; mientras que el service es anual o cada 3.000 kilómetros (lo que ocurra primero).
El TDF-1 cuesta 1.5 millones de libras (unos dos millones de dólares) y su compra incluye cursos de pilotaje y la posibilidad de participar en eventos organizados por TDF en los circuitos de Paul Ricard, en Francia; y Montmeló, en España.