El mexicano Sergio Pérez se convirtió el domingo en el primer ganador de su país en una carrera de Fórmula 1 en 50 años y apenas se atrevió a creerlo, exigiendo un pellizco para demostrar que no era solo un sueño.
Después de 190 largadas en la máxima categoría y en su penúltima carrera por Racing Point, sin ningún equipo decidido para la próxima temporada, el piloto de 30 años se encontraba en un mundo de fantasía bajo los focos del circuito de Sakhir en el desierto de Bahrain.
“Estoy en shock. No quiero estar demasiado emocionado porque soñé con este momento tantas veces que cuando me despierto me duele”, dijo después de pasar desde la última posición en la primera vuelta al primer lugar en la meta.
“Tengo que asegurarme de que esto no sea un sueño. He soñado con este momento durante 10 años”, agregó el piloto mexicano.
El último y único ganador mexicano de una carrera de F.1 antes de Pérez fue el fallecido Pedro Rodríguez, uno de los dos hermanos que dan nombre al circuito de la Ciudad de México, en Bélgica en 1970.
Checo había estado cerca antes, terminando segundo en Turquía el mes pasado, pero sin llegar nunca al escalón más alto. Lo hizo de la manera difícil el domingo, entrando en pits después de una colisión en la primera vuelta y luchando desde el último lugar en una victoria asombrosa que le hizo llorar.
Pérez fue ayudado por un raro error en la parada en boxes de Mercedes, que mezcló los neumáticos del finlandés Valtteri Bottas y el inglés George Russell, el suplente de su compatriota Lewis Hamilton y quien además sufrió un pinchazo tardío.
“Cuando me golpearon en la primera curva pensé ‘no otra vez’, no podemos ser nosotros de nuevo”, dijo sobre un incidente que puso fin a la carrera para el neerlandés Max Verstappen de Red Bull y el monegasco Charles Leclerc de Ferrari.
“Después de la primera vuelta la carrera terminó, pero se trataba de no rendirnos, recuperarnos, ir por ello, hacer lo mejor que pudimos. La suerte no ha estado con nosotros este año, pero finalmente lo conseguimos y creo que hoy ganamos por méritos”, detalló el nuevo vencedor.
“Estar ahí en lo más alto del podio, escuchar el himno mexicano y mirar la bandera en la parte superior es algo muy especial”, concluyó el azteca.