A partir del inicio de la cuarentena por el COVID-19 en el mes de marzo, al haber disminuido el uso del auto particular se pensaría que también los accidentes de tránsito han tenido la misma tendencia. Sin embargo, desde CESVI y ANSEV se afirma que los accidentes siguieron a la orden del día, incluso aumentando la intensidad de las coaliciones.
En este sentido, se detectó una marcada tendencia a que el conductor se relaje y cometa imprudencias como los excesos de velocidad en autopistas, mayor circulación de motos, y peatones más relajados en la vía pública, con todos los riesgos que ello trae aparejado.
Donde se registró mayor cantidad de colisiones durante la cuarentena fue en rutas nacionales y provinciales y en las autopistas de acceso a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
En lo que refiere a las calles de las ciudades se registraron menor cantidad de impactos, siendo los hechos más frecuentes los choques en salida de vía y el choque frontal que está asociado a las distracciones y excesos de velocidad, dos factores que son favorecidos por el poco tráfico en el marco de la pandemia.
La velocidad de los conductores es indicador de que se están aprovechando de las calles con menos tránsito y los problemas se estarían agravando, por la violencia de los impactos y porque el sistema de salud se encuentra con las camas de terapia intensiva ocupadas y reservadas para pacientes con COVID-19.
Teniendo en cuenta el factor de la velocidad en el vehículo, el incremento de un 1% de la velocidad da lugar a un aumento del 4% de los siniestros mortales y de un 3% de choques con traumatismos.
Las tasas continúan en ascenso en a medida que se flexibilizan las condiciones del aislamiento social y la cuarentena obligatoria en algunas actividades. Podemos observar, el aumento de la mortalidad vial en un 22% comparando los meses de junio y julio.
“Es importante tomar conciencia sobre las consecuencias de las conductas en el manejo como por ejemplo, las distracciones y los excesos de velocidad, dos factores de riesgo clave, sobre todo en el contexto actual donde se debe tener principal atención en el sistema sanitario. La incorporación de soluciones de emergencias permiten pensar en una posible reducción de los siniestros fatales y hasta salvar vidas”, resume Cristian Fanciotti, CEO de Ituran Argentina.