Como todo joven al que le gusta el automovilismo y tiene la posibilidad de practicarlo, Santino Rossi inició su campaña deportiva en el karting en Tierra del Fuego, su provincia natal. Con el rally como principal disciplina en la región y con varios miembros de su familia practicándolo era obvio que en algún momento Santino iba a ponerse detrás del volante de un auto para derrapar a toda velocidad.
Sin embargo, hacerlo con 13 años fue algo imposible. Fue en ese momento que el experimentado Gabriel Pozzo, ganador de la Copa FIA del autos de producción del Mundial de Rally en 2001, apareció en su vida y ahí todo cambió.
En un curso contratado el año pasado por su papá para la formación de pilotos de rally que dicta el laureado cordobés, Santino empezó con el objetivo de aprovechar este tiempo sin competencias para usarlo en su formación profesional.
Bastaron solo algunos kilómetros para que Pozzo detectara el gran potencial del jovencito y, desde ese día, comenzó el proyecto para desarrollar su técnica y experiencia y, al mismo tiempo, buscar en alguna parte del mundo competencias en las que le permitieran medirse con otros. Fue así como Santino encontró en el Campeonato de Rally de Letonia el lugar para dar sus primeros pasos ya que es el único que permite competir a menores de edad.
Con 14 años, Rossi inició su campaña internacional esta temporada en suelo letón en el Minirally en Vecpiebalga con un Ford Fiesta Rally4. Un problema en el motor le impidió finalizar el rally en su debut, pero semanas después tuvo su gran revancha: ganó en la última fecha del torneo en Riga y, además, finalizó tercero en el campeonato de RallySprint, que se disputa sobre especiales de pocos kilómetros. Gracias a estas participaciones y resultados, Santino logró la licencia para competir como piloto profesional en Letonia.
“Santino es un chico que tiene grandes cualidades conductivas y una mentalidad diferente a la de los jóvenes de su edad. Tiene un gran potencial y, afortunadamente, tanto su familia como él, están comprometidos con un lindo proyecto para ir desarrollando su carrera como piloto profesional dando pasos firmes sin querer saltarse etapas. Estamos trabajando junto a un equipo multidisciplinario en ir sentando las bases de su carrera deportiva”, afirmó Pozzo sobre su pupilo.
El proyecto continuará en 2023 con tres o cuatro fechas participaciones en el Campeonato de Letonia descartando las pruebas sobre nieve con las que se inicia el campeonato, al que sumará otros tests en suelo argentino.
Con un gran esfuerzo familiar, un presupuesto acotado y el acompañamiento de algunas marcas que se sumaron al proyecto, esta joven promesa del automovilismo deportivo argentino dio sus primeros pasos firmes en una disciplina que lo apasiona y en la que aspira destacarse en el mediano plazo.