La compañía barcelonesa Pursang Motorcycles ha anunciado el lanzamiento de su primer modelo de moto eléctrica, la Pursang E-Track, que tendrá una producción estimada de más de 400 unidades.
La empresa española nació en 2018 en Barcelona fruto de la ambición de Jim Palau-Ribes y de su voluntad de adelantarse a las tendencias de movilidad, con una motocicleta eléctrica con una estética atractiva y un comportamiento dinámico.
Para fabricar la E-Track se partió de cero, todo un reto en todos los sentidos. Inicialmente se ponen a la venta 24 unidades y su comercialización se realiza exclusivamente a través del sistema preventa en la web de la marca.
Estéticamente la moto se destaca por su imagen heredada de los óvalos de dirt track con un manillar alto y ancho y un acabado de la carrocería con ese característico colín minimalista.
El cuadro de instrumentos se materializa a través de una pantalla de TFT a color que indica la velocidad, autonomía, modo de conducción, regeneración momentánea del motor, intermitentes, luces, etc.
La Pursang E-Track es el resultado de dos años de trabajo. Por sí misma es un elenco de tecnología con el motor Bosch como elemento destacado, pero con toda una serie de detalles que la sitúan en la vanguardia técnica. Para el fundador de Pursang, “contar con el gigante alemán Bosch para dar vida a nuestros modelos es una garantía de éxito y si a esto le sumamos que todos los componentes de fabricación son españoles, conseguimos lo que queríamos: hacer de la calidad y exclusividad nuestra seña de identidad”.
Diferentes piezas de la Pursang E-Track han sido impresas con tecnología 3D, como el apoyo de la pantalla, la caja base del cableado y el soporte del faro, entre otros, en la 3DFactory Incubator, liderada por el Consorcio de la Zona Franca de Barcelona (CZFB) y la Fundación Leitat.
La Pursang E-Track representa un nuevo concepto de moto eléctrica dirigido a los amantes de los clásicos. Está ideada para moverse dentro y fuera de la ciudad. Cuenta con un motor Bosch de 11kW alimentado por tres baterías de 48 V y una capacidad total de energía de 7,2 Kw (2,4 por batería) que le permiten ofrecer hasta 140 kilómetros de autonomía y una velocidad máxima de 120 km/h.
El tiempo de recarga de las baterías es de seis horas. Cuenta con tres modos de conducción: Go, Cruise y Boost con 140, 115 y 80 kilómetros de autonomía, respectivamente. Además, dispone del modo Crawl Reverse o marcha atrás para facilitar las maniobras. La E-Track dispone de conectividad a través de Bluetooth para enlazar con la app de Bosch.
Pursang Motorcycles apuesta por los componentes de primera línea para equipar a su nueva creación como denota la presencia del propio motor Bosch, los frenos de gama alta firmados por la marca española J.Juan, los neumáticos Pirelli Scorpion y la amortiguación del especialista Ollé.
La E-Track se sustenta sobre un chasis tubular de cromo-molibdeno y la carrocería está realizada en carbono laminado. La frenada, combinada, la confía a un freno delantero de 320 mm y otro trasero de 240 mm mientras que la horquilla delantera monta barras de 41 milímetros y el amortiguador trasero es ajustable.
Respecto a las medidas, la E-Track pesa 149 kilos y mide 1.437 milímetros de distancia entre ejes. La altura del asiento es de 815 milímetros, una medida ideal para llegar a un gran público.
Pursang contempla la producción de 400 unidades en 2021 y la creación de una red de puntos de venta en toda Europa. De momento, la compañía ha cerrado acuerdos comerciales para exportar sus modelos a Alemania, Francia, Reino Unido y Portugal.