A mediados de la década de 1990, Terry Cook, editor de la revista Hot Rod, llevó a cabo un viejo sueño: combinar en un mismo coche las características más destacadas de diferentes generaciones del Lincoln-Zephyr.
Ese sueño se transformó en el Lincoln-Zephyr “Scrape” Custom, un hot rod que utiliza elementos de los ejemplares fabricados en 1938 y 1939 y detalles de los producidos en 1940 y 1941.
El proyecto de Cook pasó por las manos de varios carroceros y, según se dice, la concreción del trabajo demandó unas 4.500 horas. Sus características más visibles son el mínimo despeje al piso, sus guardabarros anchos y el techo más recortado para crear un efecto visual impactante. Tiene un motor Chevrolet 350 y una transmisión automática de tres velocidades.
Cook vendió el Lincoln-Zephyr “Scrape” Custom en 1999 y, desde entonces, fue pasando de manos tras ser la estrella de varias subastas. Además, fue copiado por Mattel para realizar una serie de sus populares Hot Wheels.