Comprobar los tapones de las válvulas y la presión de las ruedas o estacionar en un garaje son algunas de las recomendaciones para el buen mantenimiento de los neumáticos del vehículo que no se utiliza por el aislamiento social, preventivo y obligatorio por la pandemia de coronavirus.
Uno de los primeros consejos es inspeccionar el desgaste de la banda de rodadura, así como abultamientos; y retirar con cuidado piedras u objetos. También considera esencial comprobar que los tapones de las válvulas no tengan suciedad y humedad, y, si falta alguno, reemplazarlo.
Otras de las recomendaciones son chequear la presión de las gomas y aumentar alrededor de 15 psi la recomendada por el fabricante mientras el automóvil esté inmovilizado, ya que esto evitará daños y posibles puntos planos.
Complementaria a esta medida y si el vehículo no se utilizará durante mucho tiempo, lo ideal es elevarlo hasta que los neumáticos pierdan el contacto con el suelo.
También es aconsejable estacionar el coche en un garaje ya que las condiciones más oscuras y frías protegen mejor las cubiertas.
Si el vehículo “duerme” en la calle otra opción es emplear cubiertas para neumáticos, que están hechas de un material reflectante de aluminio que los protege de la luz solar y otros daños meteorológicos.