A través de un escueto comunicado, la Fórmula 1 lamentó el fallecimiento de la Reina Isabel II, la monarca con más años de servicio en la historia británica y un ícono reconocible para miles de millones de personas en todo el mundo.
“La Fórmula 1 lamenta el fallecimiento de su Majestad la Reina Isabel II”, dijo Stefano Domenicali, presidente y director ejecutivo de Fórmula 1
“Durante más de siete décadas dedicó su vida al servicio público con dignidad y devoción e inspiró a tantos en todo el mundo. La Fórmula 1 envía su más sentido pésame a la Familia Real y al pueblo del Reino Unido y la Commonwealth”, agregó.
Pese al interés que la Reina Isabel II siempre tuvo por el automovilismo jamás presenció un Gran Premio de F.1 como reina. Sin embargo, estuvo presente junto a la familia real en el Gran Premio de Gran Bretaña de 1950, el primero de la categoría, que ocurrió tres años antes de su coronación.
Su hijo mayor, Carlos, de 73 años, lo sucede como rey de inmediato, de acuerdo con siglos de protocolo, comenzando un nuevo capítulo menos seguro para la familia real después del reinado récord de 70 años de la reina.
El estado de salud de la monarca había empeorado en estos últimos meses marcados por los problemas de movilidad las reiteradas ausencias en actos especialmente simbólicos. Esta misma semana recibió a la nueva primera ministra, Liz Truss, en la residencia de Balmoral (Escocia), en lugar de en el Palacio de Buckingham como era tradición.
Ya el miércoles anuló su agenda y este jueves la Casa Real confirmó que su estado de salud había empeorado. Sus familiares cercanos, entre ellos el heredero, se han desplazado hasta Balmoral para acompañar a la reina en sus últimos momentos.
La reina llegó al trono en febrero de 1952, aunque la ceremonia de coronación se realizó en junio de 1953, tras el fallecimiento de su padre, Jorge VI, que había asumido la corona por la abdicación de su hermano. En todo este tiempo, nunca había dado muestras de seguir la estela de otros monarcas europeos y abdicar en favor de su hijo.
Isabel II estuvo casada durante 73 años con el príncipe Felipe, duque de Edimburgo, fallecido en abril de 2021. El matrimonio tenía cuatro hijos, ocho nietos y doce bisnietos.