Sin dudas, la edición 2018 del Gran Premio de la Argentina de MotoGP que ganó el inglés Cal Crutchlow (Honda) será recordado por mucho tiempo por varias razones. Aquí las repasamos…
LA POLE DE MILLER: El australiano Jack Miller (Ducati) logró su primera pole en la categoría en la pista santiagueña. La lluvia alteró toda la jornada de sábado. Por exceso o por defecto, los pilotos tuvieron que adivinar constantemente las condiciones de la pista. Miller se la jugó con los neumáticos de seco y eso le salió bien ya que ganó la clasificación con 117/1000 de ventaja sobre el español Dani Pedrosa (Honda).
EL CAÓTICO INICIO DE LA CARRERA: La lluvia que apareció durante la prueba de Moto2 provocó que todos los pilotos cambiasen sus neumáticos menos el valiente Miller, que mantuvo sus slicks como lo hizo para conseguir la pole. A minutos de la largada el australiano vio como todos sus rivales dejaban la grilla y lo dejaban solo. En lugar de largar desde boxes, el resto del parque se colocó 60 metros detrás del poleman y así comenzó la prueba.
LA PELEA POR LA VICTORIA: Sobre el final, Crutchlow, el francés Johann Zarco (Yamaha) y el español Alex Rins (Suzuki) protagonizaron un intenso duelo que ganó el primero. Así el inglés se anotó su tercer éxito en la especialidad tras los de Gran Bretaña y Australia de 2016 y, además, se fue de Termas de Río Hondo con el primer lugar del torneo.
LAS ANDANZAS DE MARC MÁRQUEZ. Antes que el semáforo diera la orden, al español Marc Márquez (Honda) se le paró la moto y aunque consiguió arrancarla, condujo en dirección contraria hasta su lugar de salida y eso le costó la primera de las tres penalizaciones que recibió durante a carrera. Por esa infracción cumplió con un “ride through” que le hizo pasar por el pit lane cuando era líder tras superar a Miller al inicio de la segunda vuelta. Tras la sanción, el campeón quedó en el 19º lugar. En plena recuperación tocó a su compatriota Aleix Espargaró (Aprilia) y fue obligado a cederle el puesto. Mientras que la última sanción fue por tirar al suelo al italiano Valentino Rossi (Yamaha), nada menos, en una maniobra que hizo recordar la que ambos protagonizaron en 2015 en el GP Argentino y que dejó a Marc en el piso y a Vale con el triunfo…
EL PÚBLICO: Una vez más las tribunas de la pista santiagueña estuvieron repletas. Hubo 47.735 espectadores el viernes, 60.564 el sábado y 63.305 el domingo. Es decir que en todo el fin de semana asistieron 171.604 espectadores, 4.000 más que en la edición 2017.
EL IMPACTO ECONÓMICO. Todo el movimiento que hubo en Termas de Río Hondo durante el fin de semana del Gran Premio y los días previos dejó en la región unos 864 millones de pesos, según lo informó el Ministerio de Turismo de la Nación. Sin dudas, una buena prueba de que el deporte motor y el turismo van de la mano.
