En 1966 la cadena estadounidense NBC puso al aire una serie protagonizada por cuatro muchachos que tenían una banda de rock. La tira, escrita por Bert Schneider y Bob Rafelson, se destacaba por tener un sentido del humor irreverente “inspirado” en la película A Hard Day’s Night (1964) de The Beatles.
Davy Jones (voz y percusión), Michael Nesmith (voz y guitarra), Peter Tork (teclado, bajo y voz) y Micky Dolenz (voz y batería) ganaron el casting en el que participaron más de 500 jóvenes y así nació The Monkees, para muchos la respuesta estadounidense a los muchachos de Liverpool.
Respaldados por los mejores compositores de la época, como Carole King, Neil Sedaka y Neil Diamond, The Monkees dispararon un hit tras otro en la serie y rápidamente entraron a un estudio de grabación para darle forma a su discografía, que incluyó nueve trabajos en un periodo de cuatro años (a mediados de los ’80 volvieron y grabaron otros tres discos).
The Monkees tenían un auto muy particular: el Monkeemobile, un Pontiac GTO convertible de 1966 diseñado y construido por Dean Jeffries, un especialista en automóviles personalizados que ideó y construyó también a Black Beauty del Abispón Verde.
El aspecto más peculiar del Monkeemobile este vehículo eran sus aletas. Las delanteras albergaban unos curiosos escapes laterales; mientras que las traseras extendieron su largo para agregarle una tercera fila de asientos. La parte frontal se modificó con un capó hundido que dejaba ver el motor casi al completo, con su blower incluido.
Se construyeron dos Monkeemobile. Uno fue utilizado en la serie, que estuvo en pantalla hasta 1968, y el otro para las giras promocionales. La versión para la TV contaba con un motor 6-71 súpercargado al que se le debió reducir la potencia para ser conducido sin tanta dificultad.
La popularidad del Monkeemobile fue tal que se vendieron siete millones de vehículos a escala 1/25. La cifra fue recén superada en los ’80 con la aparició del General Lee, el Dodge Charger de 1969 protagonista en la serie Los Dukes de Hazzard.
Cuando terminó la serie ambos autos fueron ofrecidos a Jeffries, quien decidió no adquirirlos. El auto de TV siguió a The Monkees en la gira que hicieron en Australia en 1968 y allí quedó. Aunque luego apareció en un hotel de Puerto Rico. En 1992 fue vendido en una subasta a un coleccionista de Nueva Jersey por solo 5.000 dólares.
El segundo vehículo fue comprado por el gran George Barris, quien diseñó varios autos para series televisivas como el Batimovil de Batman. En 2008 se remató y lo compró una persona de Michigan por 360.000 dólares.
En la actualidad hay otras dos réplicas del Monkeemobile. Una de ellas fue utilizada por The Monkees en 2011 para celebrar su 45° aniversario.