A pocos días de cumplirse una década del dramático accidente que sufrió el alemán Michael Schumacher en las heladas laderas de Méribel, en los Alpes franceses, nuevos detalles arrojan luz sobre los errores cruciales que rodearon este suceso que le provocó serias lesiones cerebrales.
Las revelaciones, presentadas por el periodista alemán Jens Gideon, destacan la peligrosidad de las condiciones fuera de pista y señalan demoras críticas en las operaciones de rescate. La investigación de Gideon destaca dos factores que agravaron la tragedia. En primer lugar se centra en las condiciones fuera de pista por donde Schumacher esquiaba.
El periodista habló con varias personas presentes aquel 29 de diciembre de 2003 en la estación de esquí. Entre ellos un instructor que hizo hincapié en lo peligroso de esquiar en nieve fina con rocas expuestas, condiciones que Schumi enfrentó antes de perder el control y colisionar con una roca.
“Ni siquiera en las pistas había condiciones ideales para esquiar. Era aún más peligroso aventurarse fuera de pista en un día como ese”, aseguró el instructor. Estas declaraciones refuerzan la idea de que las circunstancias climáticas y topográficas contribuyeron significativamente al accidente.
El segundo punto crítico se relaciona con las operaciones de rescate. El instructor de esquí apunta a una demora en la comprensión de la gravedad del estado de Schumacher por parte de los rescatistas. El traslado inicial a una clínica en Moutiers y la posterior decisión de redirigirlo hacia el hospital de Grenoble se consideran una pérdida de tiempo que habría empeorado su condición clínica.
Según el instructor de esquí, el error clave radicó en una evaluación deficiente por parte de los servicios de salvamento. La urgencia en entender la gravedad del caso y actuar de manera inmediata podría haber marcado la diferencia en las secuelas que Schumacher enfrentó tras el accidente.
¿CÓMO ESTÁ MICHAEL SCHUMACHER?
Una de las pocas personas que ha tenido contacto con Michael Schumacher en estos años ha sido el francés Jean Todt, jefe del Kaiser en la época de Ferrari. “Michael está aquí, así que no le echo de menos. Simplemente, ya no es el Michael que solía ser”, afirmó Todt a L’Equipe en una entrevista reciente.
“Es diferente y está maravillosamente guiado por su esposa e hijos que lo protegen. Su vida es diferente ahora y tengo el privilegio de compartir momentos con él. Eso es todo lo que hay que decir. Desafortunadamente, el destino lo golpeó hace diez años. Ya no es el Michael que conocimos en la Fórmula 1”, culminó
Estas afirmaciones de Todt se contrastan con las del periodista suizo Roger Benoit, amigo íntimo de Schumacher, quien en una entrevista a Blick, afirmó que el del alemán es “un caso sin esperanza”.