Protagonista de uno de los peores inicios de temporada para un campeón de Fórmula 1 en los últimos años, el neerlandés Max Verstappen se bajó, por el momento, de la lucha por el título pese a que al campeonato aún le quedan 20 competencias.
El piloto de Red Bull desertó en dos de las tres carreras disputadas hasta ahora (los GP’s de Bahrein y Australia) y se ubica sexto en el torneo a 46 puntos del monegasco Charles Leclerc (Ferrari).
“No tengo razones para creer en el campeonato ahora mismo”, se sinceró Verstappen, que volvió a penar con la confiabilidad de la unidad de potencia preparada por Red Bull Powertrain en colaboración con Honda.
“Obviamente, la temporada es larga, pero ahora mismo creo que necesitaría 45 carreras para tener otra oportunidad. Estoy demasiado atrás en el campeonato: 46 puntos…”, analizó el joven monarca. “Necesitamos ser más rápidos y más fiables. No pienso en el campeonato”, reconoció en declaraciones al portal AD de Países Bajos.
“Por supuesto que estoy frustrado, pero yo no puedo hacer nada. Simplemente el coche no es lo suficientemente bueno… Me sorprende que no estemos en el camino adecuado. No parece que haya una solución clara tampoco, así que tenemos mucho trabajo que hacer. Ferrari es mucho mejor que nosotros en muchas áreas”, aseveró.
Christian Horner, su jefe en Red Bull, afirmó que aún es muy prematuro como para tirar la toalla. “Solo se ha disputado el 10% del campeonato. Creo que todavía queda mucho por hacer. Lo alentador es que tenemos la base de un auto rápido”, aseguró.
Mientras que sobre la actitud de Verstappen señaló: “Obviamente se sintió frustrado cuando se bajó del auto, pero sabe que todos estamos juntos como equipo. Nos recuperaremos. Estoy seguro de que volverá con fuerza en Imola”.
