En el fantástico mundo del Turismo Carretera, donde cada gesto y acción son escrutados con lupa, una simple decisión puede desencadenar consecuencias significativas. Esta verdad fue palpable en la última carrera del TC en Toay, donde el uruguayo Mauricio Lambiris se vio envuelto en una polémica que ahora le cuesta medio millón de pesos.
La Comisión Asesora y Fiscalizadora (CAF) de la Asociación Corredores Turismo Carretera (ACTC) aplicó la pena económica a Lambiris, argumentando una “actitud indebida” durante la exhibición del trofeo en el podio del circuito pampeano.
¿El motivo? El piloto charrúa tapó con sus manos el principal patrocinador de la carrera que figuraba en el trofeo debido a que es competidor de su principal patrocinador en la popular categoría.
Pero Lambiris no fue el único en recibir un castigo del ente disciplinario teceísta. El equipo MV Racing Team, liderado por Martín Vázquez y responsables del auto de Juan Garbelino, fue multado con un millón de pesos.
La razón de semejante sanción fue el “incumplimiento de las indicaciones establecidas en el Reglamento Particular de la Prueba y en la reunión de jefes de equipos”, específicamente en lo concerniente al cambio de neumáticos.
Además de las multas, también se apercibió a Gastón Mazzacane, quien fue señalado por no dejar su auto de manera adecuada tras sufrir una rotura durante la carrera.
Es importante destacar que, según lo indicado por la CAF, tanto Lambiris como el MV Racing Team tienen un plazo de 30 días para depositar el dinero correspondiente a sus multas “por cuenta y orden de la ACTC a la Fundación Favaloro”.