Mantener el auto en buenas condiciones no es solamente llevarlo al mecánico para tener el motor bajo control; es indispensable saber cómo se encuentran los neumáticos y sobre todo en la época invernal, cuando los destinos que se elijan por vacaciones sean lugares con los cuales tal vez no estén familiarizados, y con condiciones climáticas distintas: puede haber nieve, lluvias intermitentes y también superficies de camino que disten mucho de las que se transitan durante el resto del año. En ese sentido, y para salir a la ruta en esta época, es indispensable tener en cuenta estos ítems.
REVISIÓN REGULAR: Hacer una revisión en detalle de los neumáticos para asegurarse de que estén en perfecto estado y garanticen total seguridad, ya que por ejemplo pueden presentar grietas, englobamientos en los laterales, o desgaste acentuado o irregular del dibujo.
ESTAR ATENTOS AL ENVEJECIMIENTO: El tiempo de recambio de los neumáticos es cada cuatro años aproximadamente. Los compuestos de caucho se degradan con el paso del tiempo y sus propiedades originales, como la elasticidad y la adherencia, van mermando. Su deterioro puede acelerarse por contacto con productos químicos como disolventes, combustibles, lubricantes y sobre todo por los rayos ultravioleta.
CONTROLAR LA PRESIÓN: Es necesario hacerlo al menos una vez al mes. Muchas veces la presión desnivelada entre los cuatro neumáticos es causal de efectos atribuibles a problemas de alineación. Además, las gomas con baja presión incrementan el consumo de combustible, se recalientan al rodar, se desgastan irregularmente y quedan más expuestos a daños en los impactos en baches. La presión correcta estará emparentada con la carga que el vehículo transportará y la velocidad aplicada. Y tanto la carga y velocidad nunca pueden superar a la capacidad indicada por el neumático.
ALINEACIÓN: Mantener el vehículo bien alineado es fundamental para extender la vida útil de los neumáticos. Cuando el vehículo está alineado todos los componentes de la suspensión y dirección trabajan adecuadamente y los neumáticos funcionan en su posición correcta, sin desviaciones, lo que garantiza un desgaste parejo, facilidad de manejo y economía de combustible.
TRENES DELANTERO Y TRASERO: Previo al control y corrección de la alineación, es fundamental realizar una revisión completa de los trenes delantero y trasero. Principalmente el delantero es el más delicado y el que más sufre al incluir los sistemas de dirección, suspensión, y frenos. Todas las piezas deben chequeadas para verificar su estado y correcto funcionamiento.
AMORTIGUADORES: Es aconsejable revisar los amortiguadores cada 20.000 km. Si bien su vida útil es mayor, existen factores que comprometen, como el estado de las calles. Se aconseja también verificar los amortiguadores en el momento en que se detecta un comportamiento inestable del automóvil ya que un amortiguador en mal estado puede hacer más larga las frenadas, generar vibraciones al rodar y a su vez causar daños en ejes, ruedas y suspensiones.
DIBUJO DE LA BANDA DE RODAMIENTO: Es importante que las cubiertas presenten un dibujo con profundidad mayor 1,6 mm, la mínima establecida por la legislación vigente.
PRECAUCIONES PARA LAS ZONAS CON NIEVE: Al emprender un viaje a una zona con nieve se debe tener en cuenta que se deben tener neumáticos apropiados para “nieve” o “invierno”, o aplicar el sistema de cadenas especiales para neumáticos, debido a que mejoran el agarre del neumático en este tipo de superficie, especialmente cuando el hielo se consolida.
NEUMÁTICOS NUEVOS: Si su vehículo necesita incorporar neumáticos nuevos es preferible renovar los cuatro, o en su defecto de a pares (colocar los neumáticos nuevos en el eje trasero o delantero).
Asesoramiento Dunlop Neumáticos.
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