En la Fórmula 1 no hay que dar ventajas. Eso quedó demostrado con lo que hizo el inglés Lewis Hamilton antes de subirse a su Mercedes para iniciar la actividad del Gran Premio de Gran Bretaña, la décima fecha del Mundial 2021. El múltiple campeón pasó por la sede de su equipo antes de arribar al circuito de Silverstone y realizó una tanda de pruebas en el simulador aprovechando que tenía la mañana libre.
Es que para esta cita, en la que se define la grilla de partida con una carrera sprint el sábado, se cambió el cronograma de horarios y el primer ensayo lo tuvieron recién a las 14.30 (hora local).
“Estuve en el simulador esta mañana… Tenía tiempo libre y no quería malgastarlo. Intenté ayudar a los chicos con más información sobre el coche”, explicó Hamilton después de dominar las pruebas de clasificación y asegurarse así largar adelante en la competencia sabatina de 100 kilómetros.
El múltiple campeón le ganó la tanda cronometrada al neerlandés Max Verstappen (Red Bull) por 75/1000, una diferencia que si bien parece pequeña, ha sido tomada como algo positivo por el inglés. “Hacía mucho tiempo que no estábamos tan cerca de Red Bull. Hemos dado un paso hacia delante, aunque en la carrera de mañana lo vamos a tener complicado”, explicó.
Hamilton también aprovechó para destacar el cariño recibido por la afición, que festejó esa pequeña batalla que le ganó a Verstappen. “Extrañé mucho al público en las carreras del año pasado… Estoy agradecido de verlos aquí. Sentí la energía de los aficionados y me hicieron acordar a cuando logré la pole en 2007… Para mañana también serán un apoyo importante”, culminó.