El Gran Premio de España, sexta fecha del Mundial de Fórmula 1 que se realizó en Barcelona, permitió ver al equipo Mercedes en un buen nivel. Esto se debe a la serie de actualizaciones que implementó el team alemán en el W13, que se había mostrado muy indócil con la nueva reglamentación.
En la clasificación los ingleses George Russell y Lewis Hamilton terminaron cuarto y sexto, respectivamente. Mientras que en carrera, Russell finalizó tercero detrás del neerlandés Max Verstappen y del mexicano Sergio Pérez (ambos de Red Bull).
La competencia de Hamilton fue mucho más complicada. En el inicio tuvo un toque con el danés Kevin Magnussen (Haas) y eso le hizo perder posiciones. Sin embargo, el andar de su auto le permitió avanzar puestos: quedó 19° en la primera vuelta, pero cruzó la meta en el quinto lugar.
La actuación del múltiple campeón es la que permite suponer que Mercedes nuevamente encontró el rumbo y eso lo ratificó Hamilton con sus propias palabras. “Estoy muy feliz. Me sentí como en los viejos tiempos… Este resultado se siente increíble. Una carrera como esta es como una victoria; se siente mejor que la mayoría de las victorias cuando vienes de tan lejos”, explicó.
“Hicimos muchas mejoras en el auto; el ritmo de carrera es mucho mejor, el auto es mucho más agradable de conducir en la carrera. Por eso creo que sin el choque habría estado peleando con los Red Bull”, admitió el múltiple campeón.