Luego de haber anunciado su decisión de dejar las motos y comenzar a hacer experiencia sobre autos, era obvio que la española Laia Sanz iba a enfrentar el próximo rally Dakar sobre cuatro ruedas. Ese proyecto ya es una realidad al confirmarse que será parte de la próxima aventura dakariana, que se realizará del 1 al 14 de enero de 2022 en Arabia Saudita, sobre un MINI All4Racing del Primax X-Raid Team.
“Este vehículo me da garantías de no tener problemas, de hacer un buen debut y, sobre todo, de intentar terminar el Dakar, aprender lo máximo posible y tratar hacerlo lo mejor posible”, resumió la múltiple campeona, que tendrá como navegante al ex motociclista italiano Maurizio Gerini.
Laia tiene una brillante trayectoria en el Dakar gracias a sus resultados conseguidos en la categoría motos, en la que debutó en 2011. Desde entonces llegó al final de todas las ediciones y su mejor desempeño lo consiguió en 2015 cuando terminó 9°. Además, suma 14 mundiales de trial, 10 títulos europeos de trial, 6 mundiales de enduro y 6 victorias del Trial de las Naciones.
Tras el Dakar 2021, Laia decidió poner punto final a su participación en las dos ruedas y concentrarse en los autos. Este año ha competido en la Extreme E, categoría de SUV eléctricos donde comparte equipo con Carlos Sainz; y también ha participado en diferentes carreras de cross country.
Después de haber realizado un test en Marruecos, la española tendrá su debut oficial con el Primax X-Raid Team en el Hail Rally, que se realizará en el reino saudí del 6 al 11 de diciembre y que servirá de último ensayo de cara al Dakar.
EL REGRESO DE PRIMAX
Para esta nueva etapa, Sanz cuenta con el apoyo de Primax, empresa líder en el mercado de la energía con presencia en Perú, Colombia y Ecuador. De esta manera, la compañía estará nuevamente en la competencia más exigente del mundo como sucedió en 2019 y 2020 junto al X-Raid. Esa asociación tuvo excelentes resultados: en 2019 logró el título mundial de Cross Country junto al francés Stephane Peterhansel; mientras que en 2020 subió al escalón más alto del podio en el Dakar gracias al triunfo de Sainz.