Uno de los primeros tuits de Lewis Hamilton en 2016 hizo referencia a uno de los vehículos de su colección personal: un Mercedes SLS AMG Black Series, que recibió como premio tras el segundo lugar que logró en el Gran Premio de Abu Dhabi de F.1 de 2010.
“¡Amo este coche! V12, como deberían ser los coches”, explicó entusiasmado. Y para dejar en clara su postura usó el hashtag #Bestia. Para comprobar que Hamilton no se equivocó con el calificativo, solo hay que destacar algunos detalles de la ficha técnica de este magnífico deportivo.
My SL65 Blackseries. This was a prize from the #AbuDhabiGP in 2010. Love this car! v12, how cars should be!!! #Beast pic.twitter.com/WI2qhmI08Y
ShowHeroes— Lewis Hamilton (@LewisHamilton) enero 3, 2016
Su motor biturbo V12 6.0 alcanza los 670 CV a 5.400 rpm por lo que supera al conocido Mercedes-Benz SLR McLaren. El par máximo es sorprendente: 1.200 Nm de fuerza debido a su gran cilindrada y a la fuerza obtenida por sus dos turbos (solo es superado por el Bugatti Veyron).
Además, acelera de 0 a 100 km/h en 3,8 s, de 0 a 200 km/h en 11 segundos y 0 a 300 en 36,2 segundos. Mientras que la velocidad máxima está limitada a 320 km/h y su relación masa-potencia es de 2.79 kg/CV.
Las llantas son de 19 pulgadas delante y 20 detrás. Posee un alerón trasero que emerge cuando el vehículo supera los 120 km/h. ¿Su precio? Cerca de 350.000 euros.