“¿Por qué no me voy a ir a Sauber?”, respondió con una pregunta Kimi Räikkönen, aunque aclaró que el traspaso no fue una decisión suya, horas antes del Gran Premio de Singapur, el domingo en Marina Bay. “No ha sido mi decisión, me adapto a las decisiones de los demás y este ha sido el resultado”, agregó el nórdico, quien confesó que se enteró en el último GP de Italia en Monza de su salida de Ferrari, que fichó en su lugar al francés Charles Leclerc.
“Sólo puedo pilotar un coche a la vez”, respondió luego Raikkonen, consultado sobre si ayudará al piloto número 1 de Ferrari, Sebastian Vettel, aún sabiendo ya su salida de la escudería italiana.
Algunos especialistas creen que la decisión de salida de Raikkonen, no obstante su buena campaña en 2018, se debe a su “poca colaboración” hacia Vettel, principal apuntado en realidad por la campaña con altibajos de Ferrari en el Mundial 2018.
El nuevo error de Vettel en la largada del último GP en Monza permitió el inesperado triunfo del inglés Lewis Hamilton (Mercedes), quien amplió a 30a puntos su ventaja como líder del Mundial de F.1. “Nunca se sabe que es lo que va a pasar. Ha sido una coincidencia, no ha habido planes para que todo acabara del modo que lo ha hecho. Hay una gran posibilidad de que acabe mi carrera en Sauber, pero no me interesan los récords de longevidad”, dijo hoy Räikkönen.
“Hay muchas diferencias ahora, veremos en el futuro. No se qué va a suceder con Sauber, sólo podemos estimar que ocurrirá la semana que viene. Tengo mis razones para ir y es suficiente para mí y no me importa lo que piensen otros. Estoy contento con mis razonamientos”, agregó.
