El estadounidense Josef Newgarden (Penske) ganó el Gran Premio de Long Beach de IndyCar y de esta manera logró su segunda victoria consecutiva en la categoría estadounidense. El podio lo completaron el francés Romain Grosjean (Andretti) y el español Alex Palou (Chip Ganassi Racing), vigente campeón.
La frustración habrá sido grande para Grosjean, quien acechaba a Newgarden cuando un accidente a diez vueltas del final detuvo su ataque. El incidente, protagonizado por Jimmie Johnson (Chip Gagnassi) y David Malukas (Dale Coyne Racing), requirió la intervención del auto de seguridad para limpiar el circuito luego de congelar las posiciones durante cinco giros.
En las últimas cinco vueltas, Grosjean no pudo adelantar a Newgarden. Este último, doble ganador del campeonato (2017 y 2019), suma así un segundo éxito tras el GP de Fort Worth (Texas) hace tres semanas y se sitúa líder del campeonato.
Grosjean, que está compitiendo en su segunda temporada en esta competencia emblemática del automovilismo en los Estados Unidos después de un año alentador como novato, está demostrando que está subiendo de velocidad.
El francés había detenido abruptamente su aventura en la Fórmula 1, víctima de un terrible accidente en el GP de Bahrein a finales de noviembre de 2020, del que salió milagrosamente vivo pero con quemaduras en manos y pies.
El mexicano Patricio O’Ward (Arrow McLaren SP) terminó en quinto lugar, mientras que el veterano brasileño Helio Castroneves (Meyer Shank Racing) finalizó el noveno puesto y la colombiana Tatiana Calderón (AJ Foyt Enterprises) cruzó la meta en el 16° lugar.