Sin dudas, el presente de Ferrari en la Fórmula 1 no es el mejor. Si bien comenzó el 2020 con el segundo lugar del monegasco Charles Leclerc en el GP de Austria es claro que el SF1000 no es un auto que esté en condiciones de ganar carreras o pelear por el título. Y eso mismo sabe John Elkann, presidente de la marca italiana.
“Ferrari transita un período difícil que viene de mucho tiempo atrás… No hemos ganado un campeonato mundial de constructores desde 2008 ni uno de pilotos desde 2007. Desde entonces ha habido un ciclo ganador de Red Bull gracias a la capacidad aerodinámica y luego a Mercedes por su gran habilidad en tecnologías de motores híbridos”, analizó el titular del grupo Fiat Chrysler durante una entrevista con la Gazzetta dello Sport.
“Este año no somos competitivos por los errores del proyecto. Hemos tenido una serie de debilidades estructurales que han existido durante algún tiempo en la aerodinámica y en la dinámica del vehículo. También hemos perdido potencia en el motor. La realidad es que nuestro auto no es competitivo. Lo vieron en la pista y lo volverán a ver”, agregó.
El ejecutivo, además, le ratificó su confianza a Mattia Binotto, actual responsable del equipo, y sostuvo que el objetivo es sentar las bases “para ser competitivos y volver a ganar cuando las reglas cambien en 2022”.
Elkann también se refirió a los tifosi y les pidió paciencia. “Los fanáticos están sufriendo tanto como nosotros, pero también sabemos que están cerca de nosotros. Por eso es importante ser claros y honestos con ellos. Nos espera un largo camino”, afirmó.
Y en ese contexto recordó el último ciclo exitoso que protagonizó la Scuderia: “Cuando Jean Todt abrió ese ciclo histórico de títulos en 2000, venimos de un ayuno que había durado más de 20 años desde 1979. Le llevó tiempo ya que llegó a Maranello en 1993… Lo importante es trabajar en la pista y fuera de la pista de manera coherente, construyendo el Ferrari que queremos paso a paso”.