El argentino Agustín Canapino participó en el rookie test que la categoría estadounidense IndyCar organizó para los debutantes que pretenden correr en óvalos. Este ensayo tuvo lugar en Texas Motor Speedway, que el próximo 2 de abril será escenario de la segunda fecha del torneo.
Canapino, con el Dallara-Chevrolet del Juncos Hollinger Racing, giró sin problemas y fue el más veloz de los tres aspirantes a competir en trazados ovales. Hasta superó los 360 km/h de velocidad final.
Los otros dos pilotos que giraron fueron el estadounidense Sting Ray Robb (Dale Coyne Racing) y el danés Benjamin Pedersen (A.J. Foyt Enterprises).
Sin embargo, las complicadas condiciones climáticas, que incluyeron lluvia intermitente y un fuerte viento, impidieron que los responsables de la serie yanqui realizaran correctamente la evaluación sobre las condiciones de los aspirantes. En consecuencia el ensayo continuará el viernes.
Los responsables de la división analizan las vueltas, las líneas que toman en la pista, sus comunicaciones por radio. Además, los pilotos deben girar en grupo para evaluar cómo viajan en tráfico con el corte de aire y la pérdida de carga. Una vez superada esta prueba, los pilotos recibirán el OK para competir en este tipo de trazados.
Superar este ensayo también les permite pasar al “siguiente nivel”: un nuevo test evaluatorio de cara a las míticas 500 Millas de Indianápolis, la carrera más importante del IndyCar que se realiza el último domingo de mayo.
