Desde hace unos días el ex piloto austriaco Helmut Marko, consejero de Red Bull, es noticia por su posición frente al coronavirus. La semana pasada dijo que sería bueno que el holandés Max Verstappen, la estrella del equipo de Dietrich Mateschitz, se contagie de COVID-19 para sacarle el miedo al virus. Ahora redobló la apuesta: quiere organizar un campamento para que todos los pilotos de la marca tengan esta enfermedad para estar inmunizados.
“La idea era organizar un campamento para aprovechar el tiempo muerto en el que trabajar la parte mental y física. Ese sería el momento ideal para que les llegue la infección”, analizó Marko en una entrevista al canal austríaco ORF.
“Tenemos cuatro pilotos de Fórmula 1 (Max Verstappen, Alex Albon, Pierre Gasly y Daniil Kvyat) y ocho o diez juniors. Todos son jóvenes fuertes y con muy buena salud. De esa forma, estarían preparados para cuando comience la acción”, agregó.
Si bien el ex piloto es muy influyente dentro del team y a él se le debe el descubrimiento de grandes pilotos que han contribuido a su éxito, como Sebastian Vettel o el propio Vertappen, esta vez se hizo oído sordo a su propuesta. “Digámoslo de esta manera: la idea no fue bien recibida”, confirmó.