Con el objetivo de ser una empresa neutra en carbono de cara 2040, tanto en el apartado de sus productos como de sus operaciones globales, General Motors invertirá unos 27.000 millones de dólares en el desarrollo de vehículos eléctricos y autónomos en los próximos cinco años, lo que supone 7.000 millones de dólares más de los previstos antes de la pandemia del coronavirus.
La compañía, que a partir de 2035 dejará de vender vehículos ligeros con motor de combustión, ha asegurado que para alcanzar la neutralidad en carbono se centrará en la consecución de objetivos basados en la ciencia. Para ello ofrecerá una gama de vehículos de diferentes precios y trabajará, junto con la organización Fondo de Defensa Ambiental (EDF, por sus siglas en inglés), para desplegar una infraestructura de carga.
Para alcanzar sus metas, la firma ofrecerá 30 modelos totalmente eléctricos en todo el mundo a mediados de década y el 40% de sus vehículos estadounidenses será cero emisiones a finales de 2025.
Para abordar las emisiones de sus propias operaciones, a partir de 2030 General Motors solo utilizará energía 100% renovable en sus instalaciones de Estados Unidos, algo que extenderá a todo el mundo para 2035.
“General Motors se une a gobiernos de todo el mundo que trabajan para establecer un mundo más seguro, más verde y mejor. Alentamos a otros a seguir su ejemplo y tener un impacto significativo en nuestra industria y en la economía en su conjunto”, ha reivindicado Mary Barra, la presidenta y consejera delegada del fabricante.