Mientras la Fórmula 1 lucha con problemas de “porpoising” de los autos de nueva generación, que han dejado doloridos a varios pilotos por los constantes rebotes, el jefe de AlphaTauri, Franz Tost, sugirió que si las condiciones son demasiado duras en el habitáculo, siempre hay un sofá cómodo en casa…
La salud de los pilotos fue el centro de atención en el Gran Premio de Canadá luego de la decisión de la Federación Internacional del Automóvil de exigirles a los equipos que pongan la seguridad antes que el rendimiento y aborden el problema de los autos que rebotan dramáticamente a altas velocidades.
La preocupación alcanzó nuevos niveles tras el pasado Gran Premio de Azerbaiyán cuando el inglés Lewis Hamilton, siete veces campeón de la F.1, tuvo problemas para salir de su Mercedes al final de una dura carrera.
Tost dijo que entendía que los autos eran difíciles de manejar, pero ofreció poca comprensión a las quejas de los pilotos. “Estos son autos de Fórmula 1, no son Rolls Royce y los pilotos deben ser conscientes de esto”, afirmó el team-manager austriaco.
“Si los autos son demasiado rígidos, es demasiado difícil para ellos (los pilotos), tal vez deberían quedarse en casa, en la sala de estar sentados en una silla y pueden hacer sus carreras”, agregó.
El porpoising se ha convertido en el punto álgido más reciente de la F.1 con la FIA interviniendo con una directiva técnica de medidas para reducir o eliminar el problema. Sin embargo, para Tost no se trata de un problema de seguridad.
“Estaba claro desde el principio que estos autos no serían fáciles de manejar. Este piso hace necesario que los autos estén rígidos, que los autos estén bastante cerca de la superficie. Los coches ya no son tan cómodos de conducir como en el pasado”, aseveró.
Por último, recordó que en su momento sus propios pilotos, el francés Pierre Gasly y el japonés Yuki Tsunoda, le dijeron que necesitaban ver a un dentista por las constantes vibraciones. A lo que les respondió que deberían pasar más tiempo en el gimnasio y menos quejándose: “Los pilotos deben entrenar más los músculos del cuello; eso les sería de gran ayuda”.