El rugido de los motores resonará en las estrechas calles de Macao el próximo 19 de noviembre, cuando se lleve a cabo uno de los eventos más emblemáticos del automovilismo internacional: el Gran Premio de Macao de Fórmula 3. En la lista de pilotos inscriptos para enfrentar el desafío de conquistar al traicionero Circuito da Guia se encuentra el argentino Franco Colapinto
Pese a que figura anotado junto a varios de sus rivales de la FIA Fórmula 3 con un auto del MP Motorsport, la presencia de Colapinto no está totalmente confirmada. En parte porque los cañones están apuntados a su debut en la FIA Fórmula 2 en la última fecha del torneo que se realizará en Abu Dhabi el 25 y 26 de noviembre.
MACAO: UN DESAFÍO ÚNICO Y PELIGROSO
Ubicado en la región sureste de la península de Macao, el Circuito da Guia es una maravilla de la ingeniería y una pesadilla para muchos pilotos. Sus 6.120 metros serpentean entre edificios y muros, ofreciendo un desafío que pone a prueba la habilidad y valentía de los competidores.
Este trazado urbano está lleno de baches, estrecho y ofrece limitadas oportunidades de adelantamiento, lo que convierte cada maniobra en una apuesta de alto riesgo.
Lo que distingue al Circuito da Guia son sus características únicas y peligrosas. La variación de altitud, con más de 30 metros de diferencia entre el punto más alto y más bajo del circuito, desafía la capacidad de los pilotos para adaptarse rápidamente a los cambios de terreno.
Además, una larga recta principal permite que los autos de Fórmula 3 alcancen velocidades vertiginosas de hasta 280 km/h. Esta combinación de curvas cerradas y rectas veloces convierte a Macao en un verdadero campo de batalla para los valientes.
A lo largo de los años, el Gran Premio de Macao ha sido testigo de momentos históricos y accidente espeluznantes en igual medida. La carrera ha sido ganada por leyendas del automovilismo como el brasileño Ayrton Senna y el alemán Michael Schumacher, pero también ha visto accidentes impactantes que han recordado a todos la peligrosidad inherente de este circuito como el de Sophia Flörsch en 2018.