Franco Colapinto vivió una Gran Premio de Las Vegas lleno de emociones. Principalmente, por el fuertísimo accidente que sufrió en la clasificación del viernes cuando intentaba pasar a la Q3. El piloto del equipo Williams protagonizó un espectacular accidente en la curva 16 del callejero y soportó un impacto de 50G. Aunque el incidente comprometió seriamente su participación en la carrera, Colapinto no solo logró correr, sino que remontó desde el último lugar hasta terminar 14°, mostrando una vez más su resiliencia y talento en la Fórmula 1.
“Fue un día complicado”, reconoció Colapinto tras la carrera cuando le pidieron recordar lo sucedido en la tanda cronometrada. “Venía haciendo una muy buena quali, me sentía muy bien en la Q1, pero en la Q2 todo se complicó. Pierre Gasly frenó inesperadamente en la recta, perdí mucha carga aerodinámica y tuve que arriesgar al máximo para intentar entrar a Q3. Lamentablemente, salió mal”.
El piloto de Williams detalló que la pérdida de ritmo al inicio de la vuelta lo obligó a empujar más allá de los límites, acercándose peligrosamente a las paredes del circuito urbano. Finalmente, un error lo llevó a impactar contra el muro, dejando su auto en condiciones críticas.
A pesar de los daños severos, el equipo Williams logró reconstruir el monoplaza en tiempo récord, utilizando un chasis nuevo y rompiendo el parque cerrado, lo que obligó a Colapinto a largar desde los boxes. Este esfuerzo fue reconocido por los fanáticos, quienes hicieron tendencia el hashtag #ThanksWilliams en redes sociales.
“La verdad, no puedo agradecer lo suficiente a los mecánicos. Después de un accidente como ese, tener un auto listo para la carrera fue increíble”, dijo Colapinto emocionado.
En la carrera, el argentino enfrentó un monoplaza difícil de manejar, especialmente durante el primer stint, donde lidió con un balance inestable y un exceso de sobreviraje. “El auto se movía mucho y no podía cargar las gomas traseras sin que se desestabilizara”, explicó. A medida que avanzó la carrera, el rendimiento mejoró, permitiéndole recuperar terreno en los últimos stints.
A pesar de los problemas de graining y la falta de grip en los neumáticos durante las últimas vueltas como consecuencia de intentar alcanzar a Kevin Magnussen (Haas) por pedido del equipo, Colapinto mostró una actitud combativa, destacándose en maniobras clave como los adelantamientos a Valtteri Bottas (Sauber) y Esteban Ocon (Alpine).
Terminar 14° después de partir desde boxes fue un logro significativo, especialmente tras un accidente tan severo. Sin embargo, Colapinto no pudo evitar la frustración al reflexionar sobre lo que podría haber sido: “Tenía ritmo para entrar en Q3. El auto estaba funcionando muy bien antes del accidente. Es una lástima porque teníamos potencial para un mejor resultado este fin de semana”.
Con actuaciones como esta, el argentino sigue demostrando que merece un lugar en la máxima categoría del automovilismo. Su habilidad para recuperarse de situaciones adversas y maximizar el potencial de su monoplaza lo consolidan como uno de los pilotos más prometedores de la parrilla.