Tras reprogramar las primeras carreras de su temporada 2020, que comenzará el 5 de julio en el Red Bull Ring de Austria, la Fórmula 1 tiene bien en claro que el coronavirus no volverá a ser un problema. Al menos eso se desprende de las palabras de Chase Carey, máximo responsable del campeonato, quien aseguró que si una persona da positivo de COVID-19 durante alguno de los Grandes Premios el evento no se detendrá, sino que se pondrá “en cuarentena” a la persona involucrada. Y si se trata de un piloto, el equipo deberá reemplazarlo con el de reserva.
“Que una persona dé positivo no llevará a la cancelación de una carrera. Alentamos a los equipos a tener procedimientos establecidos: si una persona tiene que ser puesta en cuarentena, tenemos la capacidad de hacerlo en un hotel y sustituirle”, señaló tras dar a conocer el calendario de la temporada.
“Tendremos un procedimiento establecido para encontrar la infección. Si un piloto está contagiado, los equipos tienen pilotos reserva disponibles”, aclaró el ejecutivo.
Por otra parte, el estadounidense reconoció que la pandemia de coronavirus provocó una sensación “de urgencia”, y que ha sido un “impulso” para “abordar cosas que probablemente se habrían abordado en el curso normal durante un período de tiempo más largo”.
“La FIA merece su reconocimiento. Ha liderado este proceso en salud y seguridad. Hay un conjunto riguroso de reglas, de 80-90 páginas, que incluyen todo, desde cómo se viaja hasta el lugar de la carrera, cuáles son los procesos para llegar a los hoteles, las medidas en la pista, en las comidas, para ir al baño, el tiempo de inactividad entre pruebas y los test”, explicó.
Así, apuntó también que realizarán pruebas de coronavirus antes de viajar y cada dos días durante las semanas de carreras. “Será como vivir en una burbuja desde que comienzas a viajar en aviones charter. Habrá transporte controlado a los hoteles, transporte de ida y vuelta a la pista desde los hoteles”, indicó. “En nuestro deporte, a veces no podemos tener dos metros de separación entre miembros del mismo equipo. Cuando un monoplaza tiene que cambiar cuatro neumáticos, no habrá dos metros entre cada persona. Tenemos que asegurarnos de tener procedimientos para gestionar todos esos riesgos lo antes posible”, subrayó.
Sobre la ausencia de espectadores al menos en el primer tramo del Mundial, Carey espera que se pueda revertir con el tiempo. “Nos gustaría tener aficionados en los eventos, pero no vamos a tenerlos en nuestros primeras carreras. No volverá la vida tal como la conocemos. Creo que debemos tomar medidas cuidadosas y reflexivas, con la protección y los procedimientos adecuados para comenzar a avanzar en el mundo que conocemos”, expuso.