El equipo Williams de Fórmula 1 vive momentos complicados tras una serie de accidentes que han afectado seriamente sus recursos y su posición en el campeonato. Lo que empezó como una segunda mitad de temporada prometedora con puntos constantes y buenos desempeños de Alex Albon y Franco Colapinto se ha complicado en las últimas dos carreras en México y Brasil. Ambos pilotos sufrieron colisiones graves que no solo dañaron los autos, sino que también dejaron a la escudería en la penúltima posición en la clasificación por equipos, justo antes del esperado Gran Premio de Las Vegas.
Los problemas de Williams comenzaron en el Gran Premio de México. Albon chocó dos veces, una en los entrenamientos libres y luego en el inicio de la carrera. Aunque Colapinto pudo terminar la competencia, la situación no mejoró en Interlagos. En Brasil, ambos pilotos sufrieron incidentes, pero los golpes fueron más duros para Albon, quien no pudo siquiera arrancar la carrera tras un choque en la última ronda de clasificación (Q3). Colapinto también tuvo un accidente durante la clasificación y aunque el equipo logró reparar su monoplaza para la carrera, la lluvia hizo que el joven argentino también se estrellara a mitad del Gran Premio.
La acumulación de incidentes ha dejado a la escudería británica sin suficientes repuestos y enfrentándose a un serio problema logístico. El jefe del equipo, James Vowles, se mostró visiblemente preocupado por la situación: “No hay ningún equipo que pueda soportar cinco accidentes en dos fines de semana de carreras. La cantidad de repuestos no es suficiente para ese nivel de desgaste”, explicó.
La carrera en Interlagos, con condiciones climáticas difíciles y un asfalto resbaladizo, resultó devastadora para Williams. “El fin de semana en Brasil fue el más brutal que recuerdo en toda mi carrera”, comentó Vowles. Las dificultades en la pista y la falta de piezas han golpeado duro a la escudería, que ahora cae al penúltimo lugar en la clasificación de constructores, solo por encima de Sauber, que aún no ha sumado puntos.
Este panorama desfavorable es especialmente desafiante para Williams, que venía mostrando señales de progreso en 2024 y parecía haber encontrado un equilibrio en el rendimiento de sus pilotos. Pero los incidentes recientes, especialmente bajo las complejas condiciones en Brasil, han supuesto un retroceso importante. Albon y Colapinto deberán ahora apoyarse en la experiencia del equipo para salir de esta situación y estar listos para el próximo reto en Las Vegas.
Con solo unos días antes del inicio del Gran Premio de Las Vegas, el equipo de Grove trabaja contra el tiempo para poner en pista dos monoplazas en condiciones óptimas. A pesar de los golpes recientes, Vowles confía en que Williams pueda volver a ser competitivo en la carrera estadounidense. “Tengo muchas esperanzas puestas en Las Vegas; fuimos rápidos allí el año pasado y confío en que el monoplaza funcione bien”, afirmó.
La carrera en Las Vegas podría ser crucial para que Williams recupere su competitividad y su posición en la clasificación. Sin embargo, el equipo tendrá que depender de una ejecución impecable tanto en pista como en boxes, además de la gestión cuidadosa de los limitados repuestos que tienen disponibles.