El austríaco Toto Wolff, máximo responsable del equipo Mercedes de Fórmula 1, se ha unido a un exclusivo club: el de las personas que tiene una fortuna valuada en 1.000 millones de dólares. Así lo afirmó la revista Forbes en su último ranking.
Wolff posee un tercio del equipo alemán desde 2013, aunque esa no es su única inversión. También es dueño de un tercio de Daimler, empresa matriz de Mercedes; y de INEOS, una empresa de productos químicos.
Forbes atribuye el aumento de la fortuna de Wolff a Netflix, destacando que la serie documental Drive to Survive lo ha convertido en “un multimillonario famoso con su efecto en el valor de los equipos de Fórmula 1”.
Wolff tiene una larga trayectoria como inversor, fundando Marchfifteen en 1998 y Marchsixteen Investments en 2004 para centrarse en empresas de tecnología e Internet.
En 2009, Wolff compró una participación en el equipo Williams y se unió a su junta directiva, antes de vender todas sus acciones en el team de Grove en 2016, mucho después de haberse unido y haber invertido en Mercedes.
En 2020, Wolff también adquirió una participación del uno por ciento en el equipo Aston Martin, que también utiliza unidades de potencia de Mercedes. Después de que Fernando Alonso terminara tercero en el Gran Premio de Bahrein, el precio de las acciones de Aston Martin subió un 15 por ciento.
La fortuna de Wolff es mucho mayor que la del siete veces campeón del mundo de Mercedes, Lewis Hamilton, cuyo patrimonio neto en 2022, según la lista de ricos de The Sunday Times, fue de apenas de 370 millones de dólares.