El equipo Red Bull continúa arrasando en el Mundial de Fórmula 1 2023, sin dar oportunidad a sus rivales de saborear la victoria. Ocho carreras disputadas y ocho celebraciones para el equipo austríaco, con seis triunfos para el neerlandés Max Verstappen y los otros dos para el mexicano Sergio Pérez.
El imponente avance de la escudería de Milton Keynes ha dejado perplejos a Mercedes, Ferrari y Aston Martin, quienes se han visto obligados a estrenar evoluciones en sus autos en las últimas carreras para tratar de acortar la brecha que los separa del RB19 ideado por Adrian Newey.
Sin embargo, la ventaja que hoy tiene Red Bull podría reducirse significativamente en 2024. Al menos eso aseguró Nikolas Tombazis, director de monoplazas de la Federación Internacional del Automóvil.
“Excluyendo a Red Bull, todos los demás están cerca. Pero creo que es solo cuestión de tiempo para que logremos una convergencia de rendimiento”, afirmó Tombazis en una entrevista para el Corriere della Sera.
“Quizás se logre en los próximos meses, tal vez a principios del próximo año. Casi todos están siguiendo el concepto técnico de Red Bull, incluso Mercedes y Ferrari. Esperamos ver nuevamente campeonatos muy reñidos, tal vez como en 2021. Pero no podemos crearlos artificialmente”, declara Tombazis.
“No podemos ir en contra de la capacidad de algunos para hacer un mejor trabajo que otros. Debemos admitirlo, con estas reglas, algunos lo han hecho mejor”, señala el ingeniero.
“La nueva Fórmula 1 se definirá en junio de 2024. Habrá una reducción significativa en la resistencia aerodinámica. Los actuales monoplazas tienen un paracaídas invisible en las rectas y queremos eliminarlo por coherencia medioambiental”, adelantó Tombazis.
“Al reducir la resistencia del aire, los monoplazas podrían incorporar algunos elementos móviles, lo cual sería beneficioso en las rectas”, admitió. “En un mundo ideal, sería concebible eliminar el DRS, pero a corto plazo no sucederá, ya que los adelantamientos serían muy difíciles de lograr”, aclaró sobre el sistema utilizado para favorecer a los adelantamientos.
“No estamos en los ‘80, cuando las simulaciones no estaban tan avanzadas y las diferencias entre los coches eran significativas. Con el nivel actual de tecnología y ciencia, eliminar el DRS sería un riesgo para la categoría”, concluye el director de monoplazas de la FIA.
Red Bull continúa demostrando su dominio en la pista, mientras los demás equipos buscan acercarse a su nivel. La Fórmula 1 sigue evolucionando, con cambios en el horizonte que podrían nivelar el campo de juego y ofrecer aún más emocionantes batallas en las carreras venideras.
