La edición 2023 del Gran Premio de Singapur de Fórmula 1 nos regaló una de las carreras más emocionantes y memorables de la temporada. La victoria del español Carlos Sainz no solo le dio a Ferrari su primer triunfo en el año, sino que también puso fin a la increíble racha de victorias consecutivas del neerlandés Max Verstappen, que ganó las diez últimas en fila; y Red Bull, que había monopolizado el primer escalón del podio en 2023.
La carrera en el circuito callejero de Marina Bay nos recordó que la F.1 es un deporte impredecible y emocionante cuando no hay un equipo dominante que acapare la cima. Durante los dos últimos años, Red Bull ha sido imbatible, ganando con autoridad 31 de las 37 últimas carreras del Mundial.
Sin embargo, el domingo hemos sido testigos de una verdadera competencia en la pista. Las últimas vueltas de la carrera fueron simplemente electrizantes, con una intensa batalla por la punta entre cuatro pilotos de tres equipos diferentes. Esta diversidad en la lucha por la victoria es precisamente lo que hace que la F.1 sea tan emocionante y atractiva para los fanáticos de todo el mundo.
Sainz, quien partió desde la pole position, ofreció un rendimiento sobresaliente desde el inicio de la carrera hasta la bandera a cuadros. Fue una actuación que le demostró a la Scuderia cuánto puede hacer cuando tiene su respaldo total.
El joven inglés Lando Norris, de McLaren, se llevó la segunda posición, demostrando una vez más su talento y su capacidad para competir en la parte delantera de la parrilla. Incluso aprovechó ese favor que le hizo Sainz al dejarlo entrar en la zona de DRS para alejarse de sus perseguidores.
Por su parte, el múltiple campeón británico Lewis Hamilton, de Mercedes, logró un meritorio tercer lugar después de aprovechar el error de su compañero y compatriota George Russell, quien sufrió un incidente contra el guard-rail en su intento por avanzar al segundo puesto.
La batalla entre estos cuatro pilotos en las últimas vueltas fue de alta intensidad al punto que Sainz, Norris y Hamilton cruzando la línea de meta separados por tan solo 1,2 segundos.
Lo que realmente hizo que esta carrera fuera especial fue la ausencia de Red Bull en la lucha por la punta, algo que los austríacos ya preveían. A lo largo del fin de semana en Singapur, los Red Bull fueron lentos y estuvieron lejos de los puestos de cabeza. Eso permitió que los equipos habitualmente luchan por ser el mejor detrás de los vehículos de RBR tuvieran su momento en el centro de atención.
Verstappen, el líder del campeonato, tuvo un desafiante fin de semana y debió conformarse con el quinto puesto en un trazado donde jamás pudo ganar después de largar desde la undécima posición. Aunque vale aclarar que pesar de este resultado, sigue en camino hacia su tercer título consecutivo…
La diversidad de equipos y pilotos en la lucha por la victoria es lo que mantiene a los fanáticos al borde de sus asientos en cada carrera. Sainz y Ferrari pueden haberse llevado la victoria en Singapur, pero lo que realmente ganamos fue un emocionante espectáculo que nos recuerda por qué la Fórmula 1 es la Máxima.