La Federación Internacional de Automovilismo (FIA) acordó medidas y cambios en el procedimiento de carrera después de lo ocurrido el pasado Gran Premio de Japón, donde la salida a pista de una grúa estuvo cerca de provocar una tragedia.
La prueba disputada en Suzuka dejó un caos en varios sentidos antes de proclamar campeón al neerlandés Max Verstappen (Red Bull). La lluvia fue el causante en gran parte, pero la FIA detectó también fallos en el procedimiento que pudieron salir caros.
“La investigación reconoció que tener grúas de recuperación en la pista en esas condiciones climáticas es un asunto delicado en vista de los trágicos incidentes del pasado”, dijo la FIA en un comunicado, sin poder obviar la muerte de Jules Bianchi en una situación muy parecida y en Japón en 2014.
“El comité de revisión determinó que, dado que las condiciones climáticas estaban cambiando, habría sido prudente retrasar el despliegue de los vehículos de recuperación en la pista”, añadió anunciando medidas como prescindir de Eduardo Freitas, director de carrera en la cita nipona.
La grúa, que entró para retirar el coche del español Carlos Sainz (Ferrari) en una zona peligrosa por la falta de visibilidad, dio un susto al francés Pierre Gasly (AlphaTauri) y provocó la queja general de toda la parrilla y la reacción de la FIA.
Tras la decisión de remover a Freitas de su puesto, el Gran Premio de Estados Unidos y las tres fechas que restarán tendrán a Niels Wittich como director. Asimismo, a partir de ahora los equipos recibirán un mensaje sobre la presencia de una grúa o vehículo de recuperación en la pista, para que se lo comuniquen ellos mismos a los pilotos.