Con la temporada 2021 de la Fórmula 1 en su recta final y con los títulos de Pilotos y Constructores sin dueños aún es lógico pensar que la batalla será encarnizada entre los únicos candidatos a esas coronas, Max Verstappen y su equipo Red Bull y Lewis Hamilton y Mercedes. Por eso no extraña algunas declaraciones “calientes” de estos protagonistas, como las que hicieron el propio Verstappen y su jefe, Christian Horner.
Ambos reaccionaron -a su modo- a la reclamación que realizó Mercedes por la maniobra que Verstappen le hizo a Hamilton en la vuelta 48 del Gran Premio de San Pablo cuando el neerlandés se salió de la trazada de la curva 4 de Interlagos para evitar que el inglés lo sobrepase.
La Federación Internacional del Automóvil, que ya había desestimado que se tratase de una maniobra antideportiva, volvió a examinar el caso en el inicio del weekend del Gran Premio de Qatar a pedido del team alemán, pero la desestimó.
“Por supuesto que puedes ver que su verdadera naturaleza sale a la luz. No es mi equipo, por supuesto, así que no tengo que lidiar con eso, pero es cuando muestras tus verdaderas intenciones y muestras quién eres”, dijo Verstappen sobre el reclamo que hizo Mercedes.
“Es interesante ver cómo la gente reacciona a la presión, cómo reaccionan cuando se les reta. Hasta ahora es la batalla política por el título más intensa que se ha desarrollado en nuestra era en este deporte”, admitió Horner.
Y después se refirió a Toto Wolff, responsable del team alemán. “No hay relación con él, hay competencia. Hay respeto por lo que Mercedes y Lewis Hamilton han conseguido, pero no necesito salir a cenar con Toto. No necesito besar su culo. Otros jefes de equipo puede que lo necesiten”, culminó el director de la escuadra austríaca.