Pese a la tremenda victoria que logró el inglés Lewis Hamilton en el Gran Premio de San Pablo de Fórmula 1, el austríaco Toto Wolff, responsable del equipo Mercedes, descargó su bronca contra las decisiones tomadas por los comisarios deportivos de la Federación Internacional del Automóvil.
La primera fue la exclusión de Hamilton de la clasificación del viernes por una anomalía del alerón trasero de su auto, algo que para el team-manager fue exagerada, y la otra fue por la falta de una sanción al neerlandés Max Verstappen (Red Bull) cuando sacó de pista al inglés el domingo en plena lucha por la victoria.
“No quiero quejarme porque no es así como veo el deporte… Creo que recibimos muchos golpes en la cara este fin de semana con decisiones que podrían haber cambiado a cualquier lado, en contra o a favor nuestro”, dijo Wolff a Autosport.
“Cuando siempre las decisiones van en tu contra es algo que me enoja. Defenderé a mi equipo y a mis pilotos, en lo que venga. Siempre he sido muy diplomático en la forma en que hablo sobre las cosas. Pero la diplomacia ha terminado hoy”, disparó.
Respecto a la maniobra con la que Verstappen se defendió del ataque de Hamilton, cuando ambos terminaron fuera de la pista en la curva 4, sostuvo: “Cualesquiera que sean las reglas, si dicen que eso está permitido, lo cual me encantaría, entonces está bien”, aseguró.
“No estoy discutiendo el principio de las carreras duras… Las carreras duras son fantásticas y deberían continuar. Pero no cuando se ha aclarado antes que no se puede sacar a nadie de la pista”, explicó.
Las penalizaciones que recibió Hamilton por cambiar el motor de combustión de la unidad de potencia y por el alerón no fueron las únicas. Tras la carrera se lo multó con 25.000 euros por sacarse el cinturón de seguridad para festejar con la bandera de Brasil.