Ford y la empresa Tmall, perteneciente al grupo chino Alibaba, lanzaron en la ciudad china de Cantón una máquina expendedora de autos “para mejorar la experiencia de compra de los consumidores” con automóviles de autoservicio.
La máquina se trata de un edificio equipado con un sistema de elevación inteligente y un dispositivo de identificación que puede albergar hasta 42 vehículos a la vez, lo que permite a los consumidores probar modelos como el Mondeo y los todoterreno Kuga y Explorer.
De esta manera, los usuarios pueden realizar su reserva de prueba de un modelo y dirigirse a la máquina, donde recogerán su vehículo para utilizarlo durante tres días. Todo el proceso se realiza a través de una aplicación móvil.
“Utilizando las ventajas en sus respectivos campos de especialización, Ford y Alibaba trabajarán arduamente para mejorar la experiencia del usuario en preventa y prueba de vehículos para aprovechar las nuevas oportunidades que mejorarán la experiencia de viaje inteligente de los consumidores”, aseguró Mark Ovenden, vicepresidente de Marketing, Ventas y Servicio de Ford en Asia-Pacífico.
Tras el acuerdo de cooperación firmado por ambas compañías en diciembre del año pasado, el llamado “Supercentro de pruebas de conducción” es el primer proyecto realizado. Ambas partes continuarán explorando oportunidades para la cooperación comercial en las áreas de dispositivos móviles inteligentes, redes de automóviles, marketing digital e inteligencia artificial.
ASÍ FUNCIONA
Tras el OK y la aprobación de la transacción, un sistema de ascensores pondrá el vehículo elegido a disposición del cliente. Éstos deben dejar una garantía y fijar una fecha para recoger sus coches. Según Alibaba, el proceso no dura más de diez minutos. Las pruebas son gratuitas, siempre y cuando se tenga una puntuación igual o superior a 700 en el sistema de crédito social de China (una especie de calificación de riesgos). Todos los ciudadanos sin un historial de transacciones parten de 550 puntos.
El sistema utilizado es parecido al que creó en 2015 la compañía estadounidense Carvana, que instaló una máquina expendedora de automóviles en Nashville con capacidad para 20 unidades. Esta tecnología también es similar a la que emplea Volkswagen en la entrega automatizada por robots.