Hace unos días la revista inglesa Autosport publicó que Ford podría volver a la Fórmula 1 de la mano de Red Bull, que está buscando un aliado para esta nueva etapa de fabricante integral.
“El Óvalo Azul ha mostrado poco interés en regresar… Se entiende que el crecimiento de los Grandes Premios, especialmente en los Estados Unidos, lo llevó a evaluar opciones”, aseguró la publicación oportunamente.
“Ford no tiene interés en la propiedad formal de la operación y se cree que está feliz de dejar a Red Bull a cargo del desarrollo técnico de la unidad de potencia, aunque existe la posibilidad de que ofrezca asistencia en cualquier área de especialización que tenga”, se aclaró.
Mark Rushbrook, director global de Ford Performance, se refirió al tema en una reciente teleconferencia organizada para hablar de la presencia de la marca en el NASCAR.
La posibilidad de que Ford esté de vuelta en la F.1 no fue ni confirmada ni negada. “Debe quedar claro que estamos aquí para hablar de NASCAR. Estamos enfocados en esa categoría”, dijo Rushbrook.
“Es cierto que hay mucha especulación sobre esto, pero no es nada a lo que responderemos de manera sustancial”, culminó tajante el ejecutivo de Ford Performance.
En los primeros años de la década del 2000, Ford estuvo en la categoría de la mano de Jaguar, marca del grupo y que corrió entre 2000 y 2004; mientras que entre 2003 y 2004 los motores Cosworth impulsaron los autos de Jordan.