La Federación Internacional del Automóvil (FIA) y las autoridades de la Fórmula 1 iniciaron una investigación sobre el grave accidente en el que el francés Romain Grosjean salvó su vida de milagro en el Gran Premio de Bahrain.
“El halo jugó un rol importante para salvar a Grosjean, pero la FIA debe entender las dinámicas de lo ocurrido en el accidente para ver si son posibles mejoramientos”, afirmó Ross Brawn, director general y responsable deportivo de la categoría.
“Hay que comprender porqué la barrera fue penetrada de ese modo, porqué hubo un incendio y porqué el auto se partió en dos”, agregó el ex team-manager.
El propio Brawn y el director de la carrera y delegado de seguridad desarrollada en la víspera en Sakhir, Michael Masi, ordenaron el análisis de los datos y las imágenes del accidente.
Brawn y Masi también pidieron la revisión de los restos del monoposto del equipo Haas y de las estructuras del circuito para entender qué pasó y avanzar en la aprobación de medidas para aumentar la seguridad de los pilotos.
“La seguridad está en continua evolución, en continuo mejoramiento. Puedes aprender de todo, de cada detalle, en especial de un incidente como éste”, completó Masi.