Ferrari ha desvelado la última adición a su serie One-Off: el Ferrari SP-8. Esta obra maestra es parte del programa Special Projects y ha sido diseñada por el Ferrari Styling Centre, liderado por Flavio Manzoni.
El nombre del automóvil, SP-8, rinde homenaje a su motor V8 twin-turbo de 3.9 litros, una de las unidades de potencia más aclamadas en la historia del automovilismo y ganadora del prestigioso premio Engine of the Year (IEOTY) en cuatro ocasiones consecutivas.
El cliente que encargó el SP-8, creado sobre la base de un F8 Spider del que hereda su diseño, chasis y motor, proviene de Taiwán y pidió agregarle el número 8 a su nombre porque tiene un significado especial en la cultura china, augurando éxito, buena fortuna y logros personales.
INNOVACIÓN Y TRADICIÓN: EL SP-8 AL DESCUBIERTO
La característica más distintiva del SP-8 es la ausencia de techo, convirtiéndolo en un auténtico roadster de dos plazas en todos los sentidos. Esto subraya su carácter deportivo y la experiencia de conducción visualmente emocionante al aire libre que ofrece. Esta solución requirió un extenso refinamiento de su aerodinámica a través de simulaciones CFD, pruebas en túneles de viento y pruebas en pista para garantizar un nivel de confort acústico y sensación de viento comparable al automóvil que lo inspiró.
El diseño principal del SP-8 se centra en la manera en que sus volúmenes se cruzan y fusionan entre sí: la fibra de carbono sin pintar envuelve la parte delantera hasta la cola, creando un efecto bitono que genera un poderoso contraste tanto en color como en materiales.
La eliminación del techo retráctil permitió a los diseñadores reformular radicalmente toda la sección trasera, dándole un volumen completo con una línea de cintura tensa. El auto se divide en dos partes conectadas por una zona central funcional en negro mate que incluye las tomas de aire laterales con conductos separados para los intercoolers y el motor. La parte superior de esta banda incorpora una rejilla para el compartimento del motor con elementos longitudinales que hacen referencia a las aletas laterales típicas de los Ferrari del pasado.
El SP-8 cuenta con una parrilla de aluminio fundido de ancho completo, fabricada a partir de un solo molde impreso en 3D. La misma presenta el mismo tema de aletas, esta vez en un movimiento vertical, con el espaciado en vista en planta que se ensancha gradualmente hacia los flancos para canalizar mejor el flujo de aire a los dos radiadores delanteros. Los elementos se optimizaron gracias a la estrecha colaboración entre el Ferrari Styling Centre y el equipo de aerodinámica, que pasó meses perfeccionando el automóvil mediante simulaciones CFD.
DETALLES EXCLUSIVOS
Otras áreas del SP-8 rediseñadas del automóvil donante incluyen los faros, las luces traseras derivadas del Roma con lentes específicas, el parabrisas, los tubos de escape, que recibieron el mismo tratamiento que los del 296 GTB, y las llantas especialmente diseñadas.
En el interior del automóvil, se realizó una modificación importante en la consola central para albergar los controles de la caja de cambios F1 que han estado presentes en la gama de Ferrari desde el debut del SF90 Stradale. Esto implicó modificar la icónica rejilla de cambios para esta aplicación específica. El acabado interior se completa con asientos con detalles en Alcantara Azul Marino grabada con láser, además de un tejido específico con efecto degradado en las alfombras.
Ferrari ha vuelto a superarse a sí misma con el SP-8, fusionando a la perfección innovación y tradición en una obra maestra automotriz que captura la esencia del lujo y la velocidad. Este roadster sin techo representa la culminación de la personalización de Ferrari, mostrando una vez más por qué esta marca es líder en el mundo de los superdeportivos de alto rendimiento.