El español Fernando Alonso correrá la 103ª edición de las 500 Millas de Indianápolis, que se disputarán el próximo 26 de mayo, con un auto propulsado con un motor Chevrolet después del acuerdo alcanzado entre McLaren y la marca estadounidense.
Desde que Chevrolet volvió a las IndyCar Series, hace siete años, logró 73 victorias en 118 carreras disputadas (61,8%), lo que alimenta las opciones de Alonso de conseguir la Triple Corona en Indianápolis tras haber conquistado ya el Gran Premio de Mónaco de Fórmula 1 (2006 y 2007) y las 24 Horas de Le Mans (2018).
“Será un privilegio llevar el Bowtie (nombre que recibe el logo de Chevrolet). Tener el poder de Chevrolet detrás de mí significa que nos estamos colocando en la mejor posición posible para competir delante. Estoy orgulloso de tener a Chevrolet como parte del equipo”, valoró Alonso en un comunicado.
Por su parte, el máximo responsable de McLaren Racing, Zak Brown, recordó: “McLaren y Chevrolet tienen un pedigrí compartido en el deporte de motor norteamericano. La oportunidad de reunir a las dos marcas para este evento especial fue demasiado buena como para dejarla pasar. La reputación de Chevrolet en IndyCar es de primera clase y serán un socio poderoso”.