Christian Horner, responsable del equipo Red Bull de Fórmula 1, teme que la pelea por el título de la Máxima e 2022 pueda “decidirse en los tribunales” debido a la inflación global y al límite presupuestario de la temporada.
Los diez equipos tienen un gasto máximo anual de 145,8 millones de dólares para la temporada 2022, pero con el aumento de costos en todo el mundo, algunos de ellos han presionado para que se permita un aumento, incluidos Red Bull, Ferrari y Mercedes. Otros, como Aston Martin, no están de acuerdo, por lo que los organizadores de la F.1 se encuentran ante un panorama complicado.
Horner continúa presionando para que se permita aumentar el presupuesto, advirtiendo que la batalla por el título podría decidirse en los tribunales. “La forma en que diseñas tu coche está bajo tu control, es algo que tú creas junto a tu grupo de diseñadores. Tienes el control de tu propio destino. Pero estamos viendo que en este momento no podemos controlar la subida de la inflación, algo que afecta a los hogares de todo el mundo. En el Reino Unido, estamos viendo una inflación del 11 por ciento”, señaló a Sky Sports.
En este sentido, Horner explicó que esto afecta directamente a “los trabajadores, las materias primas, la electricidad, los productos básicos y las piezas”.
“Es una situación de fuerza mayor con la que la FIA debe lidiar. Probablemente alrededor del 50 por ciento de los equipos va a romper el tope al final del año si las cosas continúan como están. Probablemente incluso más. No queremos un campeonato decidido en los tribunales o en París frente a la FIA. Tenemos seis meses para abordar esto, hay que actuar ahora”, avisó.
Horner también advirtió de que si no se aborda el problema, podrían perderse cientos de puestos de trabajo dentro de la Fórmula 1.
Red Bull lidera el Campeonato de Constructores, con 76 puntos de ventaja sobre Ferrari, y el de Pilotos, donde el neerlandés Max Verstappen domina con 46 unidades de renta sobre su compañero de equipo, el mexicano Sergio Pérez.