El equipo Mercedes de Fórmula 1 ha sido gran protagonista de los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 gracias al velocista noruego Karsten Warholm, quien ganó el oro en los 400 metros vallas y, al mismo tiempo, rompió el récord mundial de la especialidad. ¿Por qué?
Es que la escudería alemana, que tiene como piloto estrella al inglés Lewis Hamilton, colaboró con Puma para diseñar el calzado que utilizó Warholm. Se trata del modelo Puma Evospeed Tokyo Future Faster + que cuentan con hilos de fibra de carbono en la parte superior y una placa de carbono en la suela.
Con esas zapatillas, que pesan solo 135 gramos cada una, el escandinavo fue invencible en la competencia olímpica que se realizó el martes 3 de agosto. La ganó con un tiempo récord de 45s94/100 y se convirtió en el primer hombre en bajar los 46 segundos.
Este tipo de calzado es muy diferente a las Nike Zoom Maxfly que utilizó el estadounidense Rai Benjamin, que se quedó con la plata después de clavar 46s17/100.
Si bien todos los calzados son aprobados por la World Athletics, el modelo de Nike está en el ojo de la tormenta por sus características que atentarían contra el espíritu del deporte.
Cuentan con una placa de fibra de carbono combinadas con una espuma especial y súper reactiva que es capaz de ofrecer un retorno de energía del 85% en cada pisada, lo que genera sensación de propulsión. Además, aporta amortiguación sin sumar peso, lo que hace que siga siendo ligero.
Después de demostrar la eficacia del modelo desarrollado por Puma y Mercedes, Warholm criticó duramente a los calzados de Nike. “Si pones un trampolín allí (en las zapatillas), creo que es una mierda. Creo que le quita credibilidad a nuestro deporte. No veo por qué deberías poner algo debajo de una zapatilla de carrera”, disparó.
Y luego habló del producto de Puma, que él también ayudó a crear. “Lo que puedo decir sobre las zapatillas es que estamos tratando de hacerlas lo más creíble posible. Sí, tenemos la placa de carbono, pero hemos intentado hacerla lo más fina posible porque así es como me gusta hacerlo. Por supuesto, la tecnología siempre estará ahí, pero también quiero mantenerla en un nivel en el que podamos comparar los resultados. Eso es importante”, dijo.
Al margen de cualquier polémica, Toto Wolff, responsable de la escudería, aseguró que la colaboración con Puma que ha sido una alineación natural. “Las zapatillas de clavos deben permitir correr rápido y los coches de carreras se deben conducir rápido. En ambos diseños, todo se reduce a la ingeniería para que los productos ofrezcan el mayor rendimiento posible”, apuntó.
“Hemos aprovechado nuestra experiencia y conocimientos en fibra de carbono y ayudamos a crear unas zapatillas de clavos innovadoras que tiene el mismo tipo de complejidad que un automóvil de Fórmula 1, lo que ha sido un desafío emocionante”, agregó el team-manager.