La lejanía con el nuevo escenario del rally Dakar y los problemas económicos que atraviesa nuestro país provocaron que solo un puñado de compatriotas se animara a esta aventura en Medio Oriente. Pese a ello, hubo muy buenas actuaciones.
En motos, Luciano Benavides (KTM) dio la nota con su sexta colocación. “Llegué acá diciendo que estar entre los diez primeros ya era muy bueno y que terminar quinto era lograr el objetivo más grande. Llegue sexto, pero dí todo para intentar ser quinto. Quedé a dos minutitos, así que es como haber cumplido con lo propuesto”, resumió el salteño, que le peleó de igual a igual a su compañero austríaco Matthias Walkner.
También se lució Franco Caimi (Yamaha), que arribó en la octava posición. Mientras que Kevin Benavides (Honda) finalizó en el 19° tras retrasarse en la sexta etapa, mientras que Sebastián Urquía (KTM) arribó 59°
Orly Terranova (MINI), el único argentino que corrió en autos, terminó en la sexta posición. El mendocino tuvo la satisfacción de haber sido líder de la general tras la segunda etapa, aunque luego tuvo jornadas complicadas que lo sacaron de la lucha. “La primera semana fue extraordinaria, pero en la segunda sufrí mucho con un dolor en el cuello que me impidió empujar”, sostuvo el cuyano.
En cuatriciclos, Manuel Andujar (Yamaha) terminó cuarto y así mejoró en un puesto su posición de 2019. “De los tres Dakar que corrí este fue el más complicado por el terreno”, resumió. Por su parte, Matín Saquiz (Yamaha) culminó 10° y Carlos Verza (Can-Am), 11°.
En el camino quedaron Omar Gándara (SSV), Mariano Bennazar (quad), Leonardo Cola (moto) y Paco Gómez (moto), quien en una caída se fracturó el fémur.