Participar en el Rally Dakar es el sueño de muchos amantes del automovilismo, pero los costos asociados pueden ser una barrera importante. Desde las motos, consideradas la puerta de entrada, hasta las categorías más exclusivas como la T1 Ultimate, cada opción requiere una planificación financiera meticulosa. En este artículo, basado en un informe del podcast Dakarianos, te presentamos un desglose de los costos aproximados para competir en el en la edición 2025 de la mítica carrea.
MOTOS: LA PUERTA DE ENTRADA AL DAKAR
Comenzando con las motos, esta categoría es una de las más accesibles dentro del Dakar, pero aun así implica una inversión significativa. La inscripción básica para piloto y mecánico ronda los 20.000 euros, mientras que adquirir una moto adecuada tiene un costo aproximado de 37.000 euros. Además, el equipamiento de seguridad, indispensable para cumplir con los estándares del evento, tiene un precio de alrededor de 4.500 euros.
La asistencia es otro factor importante: optar por un servicio completo, que incluye motorhome, chófer y dos mecánicos, eleva el costo a 30.000 euros. En total, participar en esta categoría puede costar entre 90.000 y 100.000 euros con asistencia propia, aunque compartir asistencia con un equipo puede reducirlo a un rango de 65.000 a 70.000 euros.
SIDE BY SIDE (T4): EL INICIO SOBRE CUATRO RUEDAS
Por otro lado, la categoría Side by Side, conocida también como T4, es cada vez más popular entre los competidores por su balance entre maniobrabilidad y tecnología. Aquí, la inscripción para vehículo, piloto y copiloto asciende a 32.000 euros. Si se decide alquilar un Side by Side, el precio varía entre 56.000 y 60.000 euros.
La asistencia juega un papel clave en esta categoría, con costos que parten de los 200.000 euros para una asistencia básica, pero pueden alcanzar los 300.000 euros si se contrata a equipos de renombre como South Racing. También es necesario considerar los costos de repuestos, como palieres y diferenciales, que suelen cambiarse varias veces durante la carrera. En total, competir en T4 requiere una inversión que oscila entre 220.000 y 350.000 euros.
CHALLENGER (T3): ALTA TECNOLOGÍA Y GRANDES INVERSIONES
En cuanto a la categoría Challenger o T3, esta se destaca por utilizar UTV’s diseñados específicamente para la competencia. Los valores de inscripción son similares a la T4, aunque los gastos totales se estiman entre 340.000 y 380.000 euros debido a los altos precios de los repuestos y la complejidad técnica de estos vehículos.
ULTIMATE O T1: LA CATEGORÍA MÁS EXCLUSIVA
Por su parte, la categoría Ultimate o T1 es la opción más exclusiva del Dakar, orientada a equipos profesionales o amateurs con grandes presupuestos. Aquí, los autos y el equipo técnico, compuesto por un mínimo de cuatro mecánicos por vehículo, suelen ser completamente rentados. Esto eleva el costo total a un rango de entre 780.000 y 800.000 euros. Los equipos oficiales pueden triplicar esos costos, principalmente por la gran cantidad de personal afectado a la logística y organización.
CAMIONES: GIGANTES DEL DESIERTO
La categoría de camiones, que impresiona por la magnitud de los vehículos, también varía en costos dependiendo de si se utiliza un camión propio o alquilado. La inscripción para esta categoría tiene un precio de 45.000 euros por camión. Si se compite con un vehículo propio, los gastos totales ascienden a 150.000 euros, mientras que alquilar un camión de un equipo de alto perfil como De Rooy puede costar hasta 300.000 euros.
CLASSIC: PARA LOS NOSTÁLGICOS DEL DAKAR
Finalmente, la categoría Classic ofrece una alternativa más accesible y nostálgica, diseñada para quienes desean revivir el espíritu del Dakar en un recorrido menos exigente.
La inscripción para esta categoría varía entre 18.000 y 23.000 euros, y aunque los costos totales dependen del vehículo y su nivel de preparación, es una de las opciones más económicas para competir.
Participar en el Rally Dakar requiere un esfuerzo financiero que varía ampliamente según la categoría elegida. Cada opción ofrece una experiencia única, pero es esencial planificar cuidadosamente todos los aspectos, desde la inscripción y el vehículo hasta la asistencia y los repuestos, para asegurar una participación exitosa en este emblemático desafío del automovilismo.