Bugatti decidió llevar al extremo al Chiron y para eso lo puso a dieta y le incrementó la potencia de su motor W16 a 1.850 CV. Así nació el Bugatti Bolide, un súper deportivo que gracias a sus 1.240 kilos tiene una relación peso/potencia de 0,67 kilos por caballo, algo que le permitiría superar los 500 km/h y completar el circuito de Le Mans en 3:07.01, al menos en una simulación.
La reducción de peso se logró con una estructura principal fabricada en fibra de carbono, al igual que la estructura inferior. Mientras que se utilizó acero inoxidable de alta tensión para el subchasis trasero.
Además se empleó titanio para los pernos, los seguros y para piezas del eje de la transmisión creada en fibra de carbono. Este material también está presente en los soportes de los alerones delantero y trasero, que a 320 km/h aportan 800 kilos de carga en el sector frontal y 1.800 kilos en el posterior.
Para que el Bolide le gane al viento en un mano a mano además de mejorar el motor, que ahora tiene un torque de 1.850 Nm, se le colocaron nuevos turbos, se rediseñó todo el circuito de lubricación, incluyendo reservas, válvulas, bombas y tanques, se liberaron el sistema de admisión y de escape, se lo dotó de radiadores e intercoolers aire-aire con un sistema de pre-refrigeración líquido y se le colocaron radiadores de agua (al frente) y también para aceite, diferencial y transmisión.
La suspensión es de competición, del tipo push-rod, con amortiguadores horizontales y brazos fabricados en acero inoxidable. El sistema de frenos ofrece discos cerámicos de competición con cálipers aligerados de 2.4 kilos y utiliza llantas de magnesio que no pesan más de 8.4 kilos.
En lugar de elementos aerodinámicos muy aparatosos se han diseñado algunas ingeniosas soluciones, como la toma de aire superior fabricada de un material mutable que normalmente es liso, pero que en altas velocidades despliega una serie de burbujas que reducen el coeficiente de arrastre.
El Bolide, que es prácticamente un modelo de competición, mide 995 milímetros de alto, lo mismo que el clásico Type 35. Su distancia entre ejes es de 2.750 mm y tiene 1.990 mm de ancho.
El interior es para dos ocupantes, con todas las normas de seguridad de la FIA Se incluye soporte para el sistema HANS, matafuegos automático, sistema de llenado de combustible a presión, ventanas de policarbonato y cinturones de seguridad de seis puntos. Los asientos son fijos y solo se pueden mover los pedales 150 mm. Frente al conductor solo hay una pantalla LCD con los datos más importantes del auto.
En principio el Bolide es tan solo un ejercicio de ingeniería y es lo más cerca que ha estado Bugatti de un verdadero prototipo de competición en mucho tiempo. Ahora solo falta que decida fabricarlo en serie… ¿Se animará?