Como si el Aston Martin Valkyrie no fuese lo suficientemente potente para saciar el ansia de velocidad de cualquiera, la firma británica y su socio, el equipo Red Bull Racing de Fórmula 1, confirmó la producción de una versión más extrema llamada Aston Martin Valkyrie AMR Pro.
Este súper deportivo fue diseñado sin restricciones y promete tener prestaciones similares a un auto de la F.1. Para lograrlo se evolucionó la aerodinámica con alerones delanteros y traseros mucho más grandes y hasta una especie de “aleta de tiburón” similar a la utilizada en los LMP1 del Mundial de Resistencia.
El motor es el mismo que equipa al Valkyrie de serie: un V12 de 6.5 litros desarrollado por Cosworth y con un sistema de recuperación de energía de la empresa croata Rimac. Se desconoce la potencia, aunque se supone que será superior a la versión de ruta. Los neumáticos, en tanto, son los mismos que los usados en el WEC; mientras que los frenos son de carbono derivados de la Máxima.
El peso también se redujo con parabrisas y ventanas laterales de policarbonato, una carrocería de fibra de carbono más liviana y versiones más ligeras de los sistemas de suspensión y escape.
El único dato oficial sobre la prestación del Aston Martin Valkyrie AMR Pro es que la velocidad máxima será superior a los 400 km/h. La producción será solo de 25 unidades y las entregas están previstas a partir de 2020.