De Brescia a Roma y de vuelta a Brescia se ha completado el círculo y los días de la edición 2021 de las 1000 Miglia han pasado volando. Es que al igual que con cualquier cosa realmente memorable, el tiempo pasa muy rápido. Por algo Enzo Ferrari la calificó como “la carrera más bonita del mundo”.
El círculo ahora completado representa la perfección y la plenitud, es el emblema de la continuidad. Esa misma continuidad que caracteriza la relación casi centenaria entre Alfa Romeo y la 1000 Miglia: la marca ostenta el récord de victorias en esta carrera, once de las cuales fueron entre 1927 y 1957.
En esta edición, Alfa Romeo volvió a ser el fabricante de automóviles con mayor representación, con 50 coches en carrera, y sobre todo la marca ganadora. El Alfa Romeo 6C 1750 Super Sport de 1929 del equipo Villa Trasqua ha subido a lo más alto del podio, pilotado por el dúo Vesco-Salvinelli.
En esta edición de las 1000 Miglia contó con la participación de 385 coches históricos de los cuales 341 llegaron a la meta después de completar 1.719,81 kilómetros, divididos en cuatro días y atravesando 200 municipios y siete regiones.
Como detalle, todos los Alfa Romeo históricos inscritos por el departamento Heritage de la marca completaron la carrera. Las cuatro joyas de la colección del Museo Storico Alfa Romeo fueron conducidos por pilotos de excepción. A bordo del Alfa Romeo 1900 Super Sprint estuvo John Elkann, presidente de Stellantis; y su esposa Lavinia Borromeo
Los pluricampeones Giovanni Moceri y Daniele Bonetti se subieron al Alfa Romeo 6C 1500 Super Sport sin que los pequeños inconvenientes técnicos les causaran problemas, los entusiastas Alberto Vassallo y Giovanni Bianco, de la plataforma digital Car & Vintage; llevaron a la meta a un peculiar Alfa Romeo 2000 Sportiva. Lo mismo sucedió con Roberto Giolito, responsable de Heritage, y la presentadora de televisión Camila Raznovich, que llegaron al final sobre el “Guest Car” Alfa Romeo 1900 Sport Spider.
“Ha sido increíble tener la oportunidad de descubrir lugares y pueblos a veces desconocidos de este país. Mi agradecimiento especial para toda la organización y para Roberto Giolito, mi compañero de viaje. Participar en la 1000 Miglia debería estar en la lista de deseos de todo el mundo”, comentó Camila Raznovich.
Pero, como han declarado el presidente de Stellantis, John Elkann, y su mujer Lavinia Borromeo: “Además del público, el paisaje y los coches impresionantes, el elemento competitivo es de fundamental importancia y estamos muy orgullosos de que un Alfa Romeo haya ganado esta edición”.
El viaje incluyó una serie de controles de tiempo y de sellado. Cada competidor recibió una tarjeta al inicio que se debió sellar en determinados momentos de acuerdo con su número de salida. A lo largo del camino, se establecieron las pruebas cronometradas según el libro de ruta. Fueron tramos que debieron abordarse en un período de tiempo específico, en un promedio horario particular.
¿Qué es más divertido, la velocidad pura o la regularidad? Se trata de una pregunta sin respuesta que suscita opiniones encontradas, aunque compartido por todos los pilotos es el entusiasmo que se siente cada vez que arranca la 1000 Miglia.
