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“Es difícil encontrar algo positivo”. Las palabras de Agustín Canapino resumían su sentimiento tras lo que parecía un complicado regreso al Turismo Carretera, que se produjo en un autódromo de Buenos Aires con más de 50.000 personas en las tribunas. Sin embargo, el Titán demostró su calidad conductiva con una gran remontada.
Canapino aprovechó el impasse de una semana en el calendario del IndyCar para volver a la categoría que lo tuvo como campeón en cuatro oportunidades (2010, 2017, 2018 y 2019). Gracias a esta participación cumplió con el reglamento y podrá correr en las últimas cinco fechas del año del TC, un sprint que comenzará después del cierre del campeonato de la serie estadounidense.
El arrecifeño llegó a Buenos Aires acompañado por Ricardo Juncos, su jefe en el Juncos Hollinger Racing. Arribó al trazado porteño el viernes por la tarde y enseguida se puso a las órdenes del JP Carrera, que ya tenía listo su Chevy decorado con los tradicionales tonos negro, blanco y verde que caracterizan a los autos del JHR.
El sábado fue el primer contacto de Canapino con la pista. Terminó 11° en el primer entrenamiento y 8° en el segundo. Sin dudas, resultados que permitieron augurar un protagonismo en el cierre de la Etapa Regular. Sin embargo, todo se complicó en la clasificación…
“Una clasificación atípica por la lluvia hizo que tengamos que largar de atrás mañana luego de haber tenido buenos entrenamientos. Ha remontar desde el P15 en la tercera serie”, resumió Canapino, que finalizó 48° en la sesión cronometrada.
El domingo también comenzó complicado: un problema con el cable del acelerador le impidió a Canapino largar y debió partir la final desde el 49° puesto. Finalmente, cruzó la meta 14° tras una carrera con varias neutralizaciones. Luego ganó dos posiciones por recargos y exclusiones a rivales.
“El auto me iba a permitir una gran carrera, pero son cosas que pasan… Me da amargura todo lo que pasó porque quería hacer una gran carrera y correr para el público”, se sinceró Agustín, que el martes volverá a Estados Unidos para encarar la parte final del campeonato 2023 del IndyCar. “Me divertí y disfruté cada vuelta”, resumió luego tras su remontada.
Aunque no cumplió con su objetivo deportivo, Canapino tuvo la posibilidad de reencontrarse con su público y sus fanáticos, algo que le hizo pasar el trago amargo con una sonrisa.