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El ex piloto brasileño Felipe Massa ha decidido enfrentar a la Fórmula 1 y a la Federación Internacional del Automóvil en una batalla legal por lo que él y su equipo de abogados denominan una “conspiración” que lo privó del campeonato de 2008.
En un audaz movimiento, los abogados de Massa han enviado una carta formal de ocho páginas de Aviso Previo de Reclamación a los altos mandos de la F.1 y la FIA buscando daños sustanciales. Este paso legal marca un hito en la historia del automovilismo, ya que se alega que la carrera de Massa y sus ganancias se vieron afectadas por un incidente en el Gran Premio de Singapur de 2008, un episodio que finalmente lo llevó a perder el título ante Lewis Hamilton.
LA CONSPIRACIÓN QUE CAMBIÓ LA HISTORIA
Los abogados de Enyo Law, con sede en Londres, están liderando la lucha legal en nombre del ex piloto brasileño. Alegan que Massa fue víctima de una conspiración perpetrada por individuos de alto rango en el mundo de la F.1, en colaboración con la FIA y la Gerencia de la Fórmula 1.
Sostienen que Massa perdió millones de euros en ganancias y bonificaciones debido a un choque deliberado de otro piloto en el Gran Premio de Singapur de 2008. Este accidente, según ellos, fue encubierto inicialmente y solo se convirtió en un escándalo en 2009.
Las consecuencias de este encubrimiento se convirtieron en un factor determinante en la batalla por el campeonato de 2008, en la que Massa perdió por un solo punto ante Hamilton.
MASSA CLAMA POR JUSTICIA Y RECONOCIMIENTO
En la carta legal enviada a los altos ejecutivos de la F1 y la FIA, los abogados de Massa no escatiman palabras. Aseguran que “simplemente dicho, el Sr. Massa es el legítimo Campeón de Conductores de 2008, y la F1 y la FIA ignoraron deliberadamente la conducta indebida que lo privó de ese título”.
Massa, ahora con 42 años, busca no solo compensación financiera, sino también el reconocimiento de su legítimo lugar en la historia de la F.1. La carta subraya que Massa no puede cuantificar completamente sus pérdidas en esta etapa, pero estima que podrían superar los “decenas de millones de euros”. Además, se destaca que las pérdidas morales y de reputación también son significativas en este caso.
ECCLESTONE AGREGA COMBUSTIBLE A LA CONTROVERSIA
El antiguo supremo de la F1, Bernie Ecclestone, quien ocupó un papel clave en la gestión de la F.1 durante décadas, también se ha visto involucrado en esta controversia. En marzo, Ecclestone fue citado diciendo que él y el ex presidente de la FIA, Max Mosley, sabían en 2008 que el accidente del piloto de Renault, Nelson Piquet, fue deliberado pero no tomaron medidas. Este testimonio añadió más leña al fuego de la alegación de conspiración. Ecclestone, sin embargo, ahora afirma no recordar las declaraciones clave atribuidas a él.
La FIA ha reconocido haber recibido la correspondencia de los representantes de Massa y ha declarado que están revisando el asunto. Por otro lado, la F.1 aún no ha respondido oficialmente debido al cierre de agosto. Los abogados de Massa han dejado en claro que, si no reciben una respuesta satisfactoria dentro de los 14 días, procederán a emprender acciones legales en los tribunales ingleses sin previo aviso. Massa está decidido a buscar justicia y el reconocimiento que cree que merece.
